El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, ha animado a las empresas «a adelantar sus decisiones de contratación» con el nuevo plan de choque contra el desempleo, en el que se contemplan estímulos para contratar a tiempo parcial a jóvenes menores de 30 y parados de larga duración.

En rueda de prensa tras la Conferencia Sectorial de Asuntos Laborales, donde el Gobierno ha discutido con las comunidades autónomas la nueva ayuda de 350 euros –sustitutiva de los 426 euros–, Gómez ha explicado que dichos estímulos consistirán en una reducción de cotizaciones empresariales a la Seguridad Social durante un máximo de un año y que el contrato a tiempo parcial que se efectúe podrá ser indefinido o temporal, de al menos seis meses de duración y con una jornada de al menos el 50% de la habitual.

El ministro ha indicado que esta rebaja de cuotas sólo se plantea en el caso de la contratación a tiempo parcial porque es razonable en el momento actual de crisis y ha señalado que la medida ayudará a crear empleo y no a sustituir el que ya hay, más caro, por otro más barato. «No va a suponer un coste global para las finanzas públicas porque va a reducir el gasto en prestaciones por desempleo y nos vamos a ocupar de que no provoque un efecto sustitución», ha apuntado.

Gómez ha explicado que este plan de choque contempla además acciones de cualificación profesional para quienes hayan agotado su prestación. Las personas que participen en estas acciones y que carezcan de rentas económicas suficientes podrán cobrar una ayuda mensual de 350 euros durante un máximo de medio año.

El ministro ha dejado claro que este programa formativo no costará dinero a las comunidades autónomas, ya que el Estado será el que lo financie a través de distintas vías. Eso sí, esos fondos adicionales que facilitará el Estado a las comunidades para financiar las acciones formativas estarán sujetos al presupuesto anual, de tal forma que cuando se acaben, no habrá más dinero hasta el siguiente presupuesto.