Les he dicho cientos de veces que en el mercado nada es como parece, pero lo que hoy ha superado todas mis expectativas. Iban los índices americanos directos al desastre, perdiendo más de un 0,6% y dando unas muestras de debilidad preocupantes cuando poco antes de las tres de la tarde americana todo se dio la vuelta. Quedaba poco menos de una hora para la «machada» de recortar diferencias y se pusieron a ellos con auténtico ardor, al punto de que a falta de diez minutos para el cierre les quedaba una décima para igualar el cierre anterior. No hay montaña suficientemente alta cuando estos tipos se remangan la camisa y se ponen manos a la obra. Al cierre, lo habían logrado , aunque el Dow Jones se quedó a las puertas, la sesión pasará a las estadisticas del Nasdaq y del S&P como una sesión plana. Me parto de risa. Fue de todo menos plana,

Y ahora viene la pregunta ¿por qué?. Eso es lo que nos gustaría saber a todos. ¿Qué pasó en realidad para tamaño cambio de actitud? Pasaron varias cosas y ninguna de ellas, a mi entender tiene la entidad suficiente para mover el mercado de esta manera. Se confirmó que el Gobierno americano va a congelar las partidas de gastos «discrecionales» (a ver si alguien toma nota por estos lares), pero eso se sabía ya antes de comenzar la sesión. El oro cerró en mínimos de tres meses, pero eso también era algo que se veía venir. El precio de las casas cayó un 1% en el mes de diciembre y amí se me antoja un dato más negativo que positivo. El petróleo cayó de precio a mínimo de varias semanas (a ver si alguien lo traslada al precio de la gasolina), pero eso tampoco es una gran novedad.

Y Google hizo públicos sus planes de crecimiento, que incluyen contratar a unos 6.000 nuevos empleados este año. Esta puede que sí diera alas al mercado, pero al punto de darle la vuelta por completo, creo sinceramente que no. Vale que la gran preocupación ahora mismo en Estados Unidos es la creación de empleo y que seis mil nuevos empleados es una buena aportación. Vale que Google es un líder que arrastra a su sector y que puede ser el comienzo de una masiva época de contratación por parte de las tecnológicas. Pero la realidad es que Google subió un 1,3% al cierre de la sesión y que, además, cerró en precios semejantes a los que tenía a las 10 y media de la mañana estadounidense. Se me hace muy cuesta arriba pensar en que Google fuera el acicate, pero cosas más difíciles se han visto.

Seguro que mañana nos cuentan las razones de tal desmadre de última hora y nos quedamos con cara de tontos. Bien porque estaba tan a la vista que se nos ha pasado, bien porque no nos creemos nada de lo que nos expliquen, pero el caso es que ha ocurrido y el Nasdaq cerró con una ganancia del 0,06%, el S&P 500 del 0,03%. El Dow, ya les digo, se quedó a las puertas cayendo un 0,03%. Eso sí, lo que no consiguieron fue que el mercado global fuera ascendente. Por poco, pero cayeron más valores de los que subieron, pero se ve que subieron los importantes.