Al fin el pulso por el control de la inmobiliaria Colonial ha sido ganado el presidente de OHL, Juan Miguel Villar Mir, que se hará con el 30% del capital. Ha logrado el apoyo de otros nuevos inversores, el grupo colombiano Santo Domingo y una sicav de la entidad andorrana Banca Mora, que participará en el plan de reestructuración de la empresa catalana y ha superado las reticencias que su oferta encontraba dentro de Colonial.

Colonial realizará una ampliación de capital de 1.000 millones a la que acudirá el Grupo Villar Mir aportará 300 millones, lo que le convertirá en su principal accionista de una de las inmobiliarias más emblemáticas de España, que supera así una crisis que arrastra desde el estallido de la burbuja inmobiliaria.

SI bien ya ha dado pasos para su redimensión, la empresa que surgirá después de la operación financiera será diferente, más saneada también en lo que respecta a sus activos y con plusvalías por la venta de participaciones. La inmobiliaria que preside Juan José Bruguera venderá entre un 15% y un 20% de la filial francesa, SFL, que supondrá ingresos hasta 400 millones de euros adicionales que servirán para reducir la deuda financiera que asciende a 3.800 millones de euros.

Junto a la ampliación Colonial suscribirá un préstamo por 600 millones con Credit Agricole. La inmobiliaria se enfrenta al vencimiento de un crédito sindicado por 1.800 millones a finales de 2014. El consejo de administración de Colonial ha convocado junta extraordinaria de accionistas para el día 20 de enero en Barcelona.

Pero ¿qué va a pasar ahora con la actual dirección? Un problema al que se ha enfrentado Juan Miguel Villar Mir ha sido la cúpula de la compañía, mientras que sí ha contado con el respaldo de La Caixa, que cuenta con el 5% del capital.