España reducirá sus costes laborales unitarios un 1,3 por ciento en 2014, después de haberlos rebajado un 2,6 por ciento en 2013 para ganar competitividad, mientras que en el conjunto de los países de la OCDE se producirá un incremento del 0,8 por ciento, frente al 1,1 por ciento del pasado año.

Así lo indica el Instituto de Estudios Económicos (IEE) a partir de datos de la OCDE, de los que se desprende que el mayor incremento de los costes laborales corresponderá en 2014 a Estonia (+2,9 por ciento), Hungría (+2,5 por ciento) y República Checa (+1,8 por ciento).

Les sigue Alemania (+1,7 por ciento), Reino Unido (+1,2 por ciento), Francia (+1,2 por ciento), Eslovaquia (+1,2 por ciento), Polonia (+1,1 por ciento) y Austria (+0,8 por ciento). Por debajo de la media de la OCDE (+0,8 por ciento), se situaron Suecia (+0,6 por ciento), Países Bajos (+0,6 por ciento), Finlandia (+0,5 por ciento), Bélgica (+0,4 por ciento), Luxemburgo (+0,3 por ciento), Dinamarca (+0,2 por ciento) Italia (+0,1 por ciento) y Eslovenia (+0,1 por ciento).

Los únicos descensos de los costes laborales unitarios en 2014 se localizarán, además de en España, en Portugal (-1,1 por ciento) y Grecia (-5,9 por ciento).

Por otro lado, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los costes laborales unitarios en España cayeron un 1,9 por ciento en septiembre en relación con el mismo mes del año anterior. De acuerdo a estos datos trimestrales de Contabilidad Nacional, en los últimos dos años los costes laborales unitarios han venido registrando caídas.

En este período, la mayor caída se registró en diciembre de 2012, con un -5,4 por ciento, aunque la tendencia se ha venido moderando a lo largo de este año, cuando los costes cayeron un 3,1 por ciento en marzo; un 2,5 por ciento, en junio; y el ya citado 1,9 por ciento registrado durante el tercer trimestre de este año.