La reforma laboral fracasa en su intento por relegar el despido

03/02/2014

Luis M. del Amo. A pesar de la nueva normativa, la extinción de contrato sigue siendo la medida de ajuste más utilizada por las empresas, según Adecco y Fundación Sagardoy.

La reforma laboral de 2012 parece haber fracasado en su intento por que las empresas den la espalda al despido. Aunque las empresas aprovechan a fondo el resto de ventajas concedidas -los salarios acumulan ya un descenso del 10 por ciento-, las empresas siguen optando por el despido como mecanismo prioritario de ajuste, según asegura un estudio de Adecco y la prestigiosa Fundación Sagardoy, que se ha basado en encuestas realizada entre empresas con más de 50 trabajadores.

El despido sigue siendo la medida favorita de las empresas de más de 50 trabajadores para reducir costes y vadear la crisis. Según el ‘Observatorio de la reforma laboral de 2012′ de la Fundación Sagardoy y Adecco, un 44 por ciento de las empresas se decantó por esta medida de ajuste, que sigue siendo la más utilizada.

Aunque abarató el despido, la reforma laboral se planteó como objetivo que las empresas eligieran otras formas de rebajar costes, a través de la llamada flexibilidad interna con nuevas facilidades en medidas como bajadas de salarios, reducción de jornada o redistribución de tareas, horarios o plantillas entre los distintos centros de trabajo.

Pero, de momento, las empresas de este tamaño -minoritarias aunque contenedoras de gran parte del empleo- siguen optando por el despido. Ahora bien, cada vez lo prefieren más barato, según constata el informe.

La reforma ensanchó la vía para que los despidos se calificaran de procedentes; se abarató la fórmula del despido objetivo y sobre todo se abrió la mano a la hora de clasificar la procedencia de un despido, lo que abarata aún más las indemnizaciones.

Gana peso el despido objetivo, más barato

El estudio detecta que cada vez más empresas se acogen a la fórmula del despido objetivo, que rebaja las indemnizaciones a 20 días por año trabajado. En su segunda edición, el observatorio recoge que han aumentado desde el 37 por ciento hasta el 43 por ciento el número de empresas que utilizan el despido por causas organizativas, técnicas o de la producción; uno de cuyos ejemplos más sonados se puede encontrar en el expediente de regulación de empleo (ERE) en Coca-Cola, la marca que, tras la fusión de sus diferentes embotelladoras antes dispersas por España, aduce ahora motivos organizativos como causa suficiente para despedir, aun con beneficios, a cientos de trabajadores.

Pero, además de despedir, las empresas recurren también el resto de medidas de flexibilidad interna de que les dotó la reforma del PP, como bajadas de sueldo, aumento de jornadas o reorganizaciones de horario o de tareas. Si bien es cierto que cada vez son menos las empresas que optan por simultanear despidos y el resto de medidas: un 34 por ciento, seis puntos menos que en la anterior oleada.

La vía silenciosa del despido

Sin embargo, a pesar del ruido de los ERE, la puerta de salida del puesto de trabajo sigue siendo sobre todo el despido individual. De forma callada, la realidad es que un 76 por ciento de los trabajadores despedidos lo son por la vía del despido individual, frente al 24 por ciento restante del despido colectivo.

Dentro de los despidos individuales, y hasta la reforma laboral, en España se despedía a los trabajadores mediante el llamado despido ‘express’, inaugurado por Aznar y que consistía en una esquizofrenia legal donde, a costa de reconocer la improcedencia de un despido, y pagar por ello altas indemnizaciones, se permitía al empresario ahorrar en costes e incertidumbre.

En 2012, con el PP otra vez en el poder, se pretendió superar esa anomalía. Y poco a poco se está consiguiendo, según indica este estudio, que celebra la rebaja en el coste de las indemnizaciones para las empresas. Así, y aunque sigue siendo minoritaria, la indemnización por despido procedente, de 20 días, representa ya un 10 por ciento del total de indemnizaciones pagadas en casos de despido individual; es decir, cuatro puntos más respecto a la anterior edición del estudio.

Los salarios bajan un 10 por ciento

Aunque se sigue despidiendo, las empresas no han echado en saco roto el resto de ventajas que les concedió la nueva normativa, y que se resumen en más facilidades para variar a sus empleados salarios o tareas. Bien a través de descuelgues de convenio, bien a través de modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo, las empresas que han utilizado estas medidas han reducido ya los salarios en torno al 10 por ciento a sus plantillas; una reducción que es incluso mayor si hablamos de jornadas de trabajo.

Aun así, según el director general de Adecco, Santiago Soler, tras esta reducción del 10 por ciento practicada, opina que “la mayor parte del ajuste en salarios está hecho”.

Además del despido y las bajadas de salario, las empresas aprovechan otras opciones, como son la movilidad geográfica, que se mantiene en niveles próximos al 20 por ciento; la movilidad funcional, usada en un 40 por ciento de las empresas que han respondido a la encuesta; y la modificación sustancial de condiciones de trabajo, en niveles también cercanos al 40%.

Además, un tercio de las empresas encuestadas afirmaron que planean cambiar su marco de relaciones laborales en los próximos meses, abandonando el convenio de sector y redactando un convenio de empresa, otro de los objetivos de la reforma, para disgusto de los sindicatos que ven así bajar el número de trabajadores cubiertos por cada convenio, lo que los debilita.

Casi ninguna empresa está dispuesta a dejar pasar la oportunidad. El informe destaca que se ha reducido el porcentaje de empresas que ni ha realizado ni prevé realizar ningún ajuste en su plantilla o de condiciones de trabajo; desde el 28 por ciento anterior al actual 23,8 por ciento.

¿Te ha parecido interesante?

(+4 puntos, 4 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.