El 2011 no es una año cualquiera, se podría decir que es como el año mágico para el Norte de Noruega. El sol tiene períodos de tranquilidad y otros de mayor actividad durante, aproximadamente, ciclos de 10 años. El último período más activo del sol se dio en 2001, por lo que este 2011 se prevé que la contemplación de las auroras boreales sea mayor.

Por otro lado, también destacar que este año el Skrei abunda y su calidad es excelente. Esto se debe al incremento de arenque en el Norte de Noruega que atrae a un mayor número de este tipo de bacalao tan exquisito que emigra del Mar de Barents y desova en la costa de las Islas Lofoten. El que ha probado el pescado en las islas Lofoten lo recordará toda la vida porque es sabroso. Sabe a lo que debería saber el pescado salvaje.

Lofoten es un destino de invierno único. Su enclave por encima del Círculo Polar Ártico, permite que los visitantes disfruten de la naturaleza  tal cual sin que haya intervenido el hombre en ella y de una vida animal autóctona, una flora y una fauna imponentes. No sólo nos chocará la penumbra en invierno y la luz permanente en verano, es que todo es diferente en esas islas. El silencio, la naturaleza en estado tan puro, la escasa población, las carreteras sin transitar o la comida tan sencilla y sabrosa. Lo mejor es alquilar un coche y recorrerla al ritmo lento de Lofoten.

El buceo en profundidad y en superficie es de las actividades al aire libre más solicitadas, ya que la visión del manto de coral blanco en las paredes de los acantilados es perfecta gracias a las corrientes del norte y la pureza de sus aguas.

El rafting en el océano es otra de las atracciones. La lancha lleva a sus tripulantes por mar abierto, empinadas montañas, angostos estrechos y exuberantes islotes. También el paseo en kayak por las aguas azul oscuro de este archipiélago montañoso, que puede combinarse con montañismo y escalada si se desea.

Otra característica muy popular de las Islas Lofoten es el alojamiento en rorbu o cabañas de pescadores. Originalmente se construyeron como alojamiento para los pescadores que acudían a las temporadas altas de pesca en las Lofoten. Hoy en día las rorbu están restauradas y su popularidad, entre noruegos y extranjeros, ha crecido. Son cabañas de madera al borde del agua, perfectamente equipadas, en las que por la tarde te dejan la cena y el desayuno preparado para el día siguiente. Visitar las islas Lofoten no es barato pero merece la pena ir, aunque sea una vez en la vida.

Más información sobre las Islas Lofoten: http://www.visitnorway.com/es/Articulos/Articulos-tematicos/Esta-es-Noruega/Historia/Los-exploradores-polares/

Información sobre el alojamiento en las rorbu: http://www.visitnorway.com/es/Articulos/Articulos-tematicos/Donde-alojarse/Estancia-en-una-cabana-de-pescadores-en-Noruega/