El déficit público se situó en 4.926 millones, el 0,47% del PIB, en el primer mes del año frente al 0,53% registrado un año antes, según ha señalado la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, en la rueda de prensa convocada por el Ministerio de Hacienda para explicar los datos de déficit público de 2013.

La cifra se desglosa en un déficit del Estado de 6.128 millones (el 0,57% del PIB), un déficit de las comunidades autónomas de 1.176 millones (el 0,11% del PIB) y un superávit de la Seguridad Social de 2.378 millones (el 0,22% del PIB).

Dentro de las comunidades, un total de 14 regiones cerraron el primer mes del año con déficit, frente a tres que acabaron enero con superávit:  Asturias (+0,11%), Baleares (+0,03%) y Galicia (+0,01%).

Las que registraron más déficit fueron Navarra (-1,13%), Murcia (-0,22%), Andalucía (-0,18%), Extremadura (-0,17%), Cataluña (-0,16%), Cantabria (-0,13%), Comunidad de Madrid (-0,09%) y Castilla-La Mancha (-0,09%).

Los saldos negativos fueron más bajos en Castilla y León (-0,07%), País Vasco (-0,06%), Aragón (-0,04%), La Rioja (-0,04%), Comunidad Valenciana (-0,04%) y Canarias (-0,03%).

Currás también ha dado a conocer el déficit del Estado acumulado en los dos primeros meses del año, puesto que los datos de la Administración Central siempre van un mes por delante. Hasta febrero, el déficit del Estado sumó 12.404 millones, el 1,18% del PIB.

La cifra supone una moderación del 12,3% respecto a la registrada un año antes, cuando este saldo sumó 14.137 millones de euros, el 1,38% del PIB. Sin embargo, prácticamente se ha duplicado respecto a la registrada en enero.

El déficit del Estado en los dos primeros meses del año es consecuencia de unos ingresos de 15.557 millones, un 7,1% más, y de unos gastos de 27.691 millones, un 2,4% menos. En términos de caja, el déficit del Estado sumó 11.392 millones hasta febrero, el 1,09% del PIB.

Crece la recaudación

Los ingresos no financieros sumaron 21.313 millones hasta febrero, lo que supone un aumento del 22,1%, mientras que los pagos no financieros alcanzaron los 32.705 millones, un 0,5% menos. La recaudación impositiva ascendió a 29.436 millones, un 7,5% más.

En concreto, la recaudación del Estado por impuestos directos registró un incremento del 2%, con 12.553 millones. El IRPF aumentó un 10,4% y sumó 15.503 millones, principalmente por el aumento de las retenciones del trabajo (+8,1%), mientras que el Impuesto de Sociedades registró una cifra negativa de 3.791 millones debido al incremento de las devoluciones.

Por su parte, la recaudación de impuestos indirectos totalizó 16.883 millones hasta febrero, un 12% más. En concreto, los ingresos de IVA sumaron 13.055 millones, un 12,4% más, mientras que los Impuestos Especiales generaron 3.346 millones, un 11,9% más por el incremento de los impuestos sobre Hidrocarburos y las Labores del Tabaco en un 13,1% y un 7%, respectivamente. El Impuesto de la Electricidad, en cambio, bajó un 1,6%.

En el capítulo de gastos, destacan las transferencias realizadas hasta finales de febrero, que suponen el 62,6% de los pagos aunque hayan bajado respecto a un año antes. Se han moderado las transferencias a la Seguridad Social, al Servicio Público de Empleo y a las corporaciones locales, pero han aumentado las realizadas a las comunidades y a las sociedades y empresas públicas como consecuencia del pago de 902 millones a la Comisión Nacional de la Energía para financiar el coste del sistema eléctrico.

Los gastos de personal, por su parte, subieron un 11,5%, hasta 2.565 millones, mientras que los gastos corrientes en bienes y servicios bajaron un 12,1%, hasta 284 millones. Los gastos financieros, por su parte, crecieron un 9,9% y sumaron 8.731 millones, mientras que las inversiones reales bajaron un 46,1%, hasta 643 millones.