Cerdeña lo tiene todo. Parajes de ensueño, ambiente sofisticado, ocio de alto nivel, gastronomía deliciosa, alojamientos de gran lujo, ocasos formidables… Pero si tuviera que destacar algo, serían, sin duda, sus playas y calas. Junto con algunas localizaciones emblemáticas de nuestras Baleares y ciertas islas griegas, lo mejor del Mediterráneo. Es complejo seleccionar unas pocas entre tanta belleza, pero ahí van algunas de las más recomendables.

En la zona de Alghero.

–          Playa de Mugoni. Se encuentra rodeada por un bosque de pinos -el entorno me recuerda a algunas calas mallorquinas- en la dirección hacia Capo Caccia. Es una playa muy animada y cuenta con numerosas alternativas de ocio: bares, chiringuitos, agradables restaurantes…

–          Playa del Lazzaretto. Se encuentra ubicada en dirección a Fertilia. Nos encontramos ante una coqueta bahía con calas de aguas cristalinas y frías en la que destaca la famosa torre del Lazzaretto, omnipresente en fotos y postales.

En la Costa Norte.

–          Isla de Asinara. Es la tercera isla más grande de Cerdeña, tras San Antioco y San Pietro. Es una zona ideal para hacer piragüismo, navegar, pescar o bucear. Y  cuenta con Cala d´Arena, una de las mejores playas en Cerdeña. En realidad son dos playas de arena fina bañadas por un mar que no desmerece paisajes del Caribe o de Indochina.

–          Stintino. Su playa de la Pelosa está reconocida como una de las más bonitas del mundo. Te sumerges en un entorno idílico del que no querrás escapar.

–         Costa Paradiso. Cuenta con varias playas, todas fantásticas, pero si hay que destacar una en esta zona, me quedo con Cala Li Cossi, de aguas limpias, acotada por un valle de granito y rodeada de abundante vegetación, que consigue recrear un paisaje impresionante.

Costa Esmeralda.

–          La Maddalena y su archipiélago. Lo conforman las islas de Caprera, Santa Maria, Budelli, Razzoli, Spargi, Spargiotto y Santo Stefano, que son parte del Parque Nacional de La Maddalena, un área protegida. Entre todas sus orillas paradisíacas,  destaca una de las más reconocidas de la isla: la de arena rosa de Budelli. ¡Imprescindible!

–          Playa de Capriccioli. Se trata de una de las más famosas y de las preferidas por los  lugareños. De fácil acceso, destacan las intensas tonalidades del azul del mar en este paraje.

–          Playa del Pevero (en el mítico Porto Cervo). Situada en el epicentro de Costa Esmeralda, se encuentra rodeada por una frondosa vegetación y por dunas naturales de arena impoluta, casi blanca.

Zona Ogliastra.

–          Cala Luna, denominada así por su forma, simulando el cuarto creciente de nuestro satélite. Situada en la costa oriental  en la zona de Dorgali y Orosei, es pequeña pero mágica.

–          Cala Mariolu. Se caracteriza por la tonalidad esmeralda de sus aguas y por la simpática compañía que ofrecen sus visitantes más habituales: las focas monje.

–          Cala Goloritzé Baunei. Se encuentra al lado de Cala Luna por lo que es conveniente visitar ambas en una misma jornada. Aguas cristalinas, arenas blancas y vegetación selvática.

Zona Sur

–          Playa de la Costa Rei. Ha sido reconocida por publicaciones especializadas y en numerosas ocasiones como top ten entre las más hermosas del planeta.

–          Playas de Chia. Cuenta con numerosas playas y calas como las imprescindibles de Cipolla, Giudeu o la famosa Playa de los Muertos -rodeada de rocas de color rosa-, todas recomendables, con aguas trasparentes, playas vírgenes, bahías y playas de arena blanca. Más al sur se ubica Cabo Malfetano, lugar donde los que practican submarinismo, pueden recrearse con las ruinas de los antiguos puertos y muelles púnicos sumergidos. En definitiva, nos encontramos ante algunas de las playas más vírgenes de Cerdeña; y eso, es mucho decir…