El último cambio en los tipos de interés adoptado por el BoE tuvo lugar el 5 de marzo de 2009, fecha en la que la institución también estableció un programa de compra de activos mediante la emisión de reservas, que fue ampliado en 25.000 millones de libras, hasta su importe actual, el 5 de noviembre de 2009.

El producto interior bruto (PIB) de Reino Unido registró en el último trimestre de 2010 una inesperada contracción de medio punto respecto al trimestre anterior, cuando se había incrementado un 0,7%, debido al impacto negativo sobre la actividad económica de la dureza de las temperaturas invernales en el país.

Por contra, la inflación anual de Reino Unido se situó en diciembre en el 3,7%, frente al 3,3% registrado el mes anterior y muy por encima del objetivo de estabilidad de precios del Banco de Inglaterra (BoE).