Un día más que parece que no va a haber recorte. La excusa de la salida de Mubarak ha resultado perfecta, pero más aún que el ejército vaya a tutelar una transición en Egipto, lo que es interpretado por los mercados como un síntoma de que no se producirá el temido caos.

¿Y qué hacer en estas circunstancias? Pues por difícil que parezca, subir y subir. ¡¡Y mucho!! Uno nunca sabe si esta es la definitiva o si en realidad es la antesala de la caída pero como dicen los castizos, que me quiten lo bailao. Tenemos a los tres índices americanos en máximos desde 2008 y con todo apuntando al norte. Incluso los más pesimistas hablan ahora de una posible corrección pero mercado alcista de fondo.

En realidad, eso es lo que más me preocupa, el optimismo. Para que la preocupación sea máxima solo se debe añadir que mi vecino del segundo me cuente que ha invertido en talo o cual valor, lo que aún no ha ocurrido. Incluso dice que de momento le parece peligroso, lo que me deja algo más tranquilo, dentro de lo tranquilo que se puede estar en el mercado.

Pero lo que importa es lo realizado hasta ahora y lo cierto es que el Dow subió un 0,36%, el Nasdaq un 0,68% y el S&P 500 un 0,55%. Y los valores alcistas ganaron por goleada a los bajistas. Vivir para ver. Se ha pasado del temor más absoluto a la euforia más increíble en apenas unas horas.