El magistrado del Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid, Jorge Montull, ha señalado para el 24 de febrero de 2015 el juicio a Mapfre por la demanda de indemnización planteada por un grupo de víctimas del avión de Spanair que se estrelló en el Aeropuerto de Barajas el 20 de agosto de 2008. En una audiencia previa al juicio, que estaba prevista inicialmente para el 20 de mayo, el juez fija esa fecha con la reserva de que se pueda obtener una sala que pueda dar cabida a un mayor número de asistentes en el edificio de los Juzgados situado en la Gran Vía madrileña.

Mapfre ha reiterado en la audiencia previa su intención de agilizar los procedimientos judiciales para poder indemnizar cuanto antes a las víctimas y a los perjudicados del accidente de Spanair. El abogado de la compañía ha solicitado al juez que proceda a dictar sentencia sin necesidad de juicio, ya que la diferencia entre las partes se centra exclusivamente en cuestiones jurídicas relacionadas con la valoración económica del daño.
“La compañía ha intentado en todo momento acelerar los procedimientos, por ello, Mapfre se adhirió al recurso presentado por la otra parte en contra de la suspensión de esta audiencia, prevista inicialmente para el 20 de mayo”, explican en la aseguradora.
El abogado de Mapfre ha relatado en la audiencia previa cómo, en hasta seis ocasiones, ha realizado ofrecimientos de negociación y/o mediación a los demandantes, estando a su disposición un total de 4.720.000 euros. Esas indemnizaciones han sido calculadas “conforme a los criterios habituales de los tribunales españoles para estos casos”, insisten en Mapfre. Esta oferta indemnizatoria ha sido expresamente reiterada en la sala indicando las cuantías individualizadas por cada víctima.
A petición de Mapfre, el juez ha acordado también una prueba pericial judicial para valorar las secuelas de uno de los lesionados.
Mapfre recuerda que ya ha alcanzado acuerdos con víctimas y perjudicados correspondientes a más de 70 ocupantes del avión siniestrados, incluidos 11 de los 18 supervivientes. Y subraya que “mantiene abiertas vías de diálogo permanente, que permiten acelerar el pago de las indemnizaciones”.

Posiciones alejadas

Los reclamantes, que son 71 personas, familiares de 30 fallecidos en el vuelo a Gran Canaria y un superviviente en el siniestro aéreo, han constatado en la audiencia previa que mantienen «posiciones muy alejadas» y que no hay posibilidad de llegar a un acuerdo con Mapfre.
Este grupo de víctimas pide una indemnización por daños físicos, psicológicos por un importe total de 43 millones de euros, que contrasta con los 4,7 millones que ofrece Mapfre, y “a los que hay que restar una serie de anticipos”, señala uno de los demandantes.