Carmen Lomana está viviendo la exaltación lomanista a tope. El gran baño de multitudes, que no es el de la bañera del anuncio de las hamburguesas Burger Queen, se lo dará en las fallas de Valencia. Ha sido nombrada fallera mayor de la Falla del Paseo de la Alameda- Avd. de Francia. Eso significa que este jueves 17, en una cena a la que se han apuntado 450 personas (a una media de 50 euros el cubierto), tendrá lugar la Exaltación, que es como una presentación en sociedad. Allí el mantenedor, exaltará –de ahí el nombre- su figura y sus méritos. Ella llegará andando desde su hotel, vestida con uno de los tres trajes de valenciana que le han regalado, los tres pueden rondar los 20.000 euros, hasta el Alameda Palace, donde tendrá lugar la cena, a la que está invitado Luis Alfonso de Borbón. Por cierto, su madre, Carmen Martínez Bordiu, también fue fallera mayor. Lomana, no irá sola, la acompañará su familia, que no sus pretendientes, y los casi 200 hombres de la falla la acompañarán con antorchas. Las mujeres la recibirán en la entrada, vestidas de valencianas. Es tal la expectación que está levantando que contará con varios guardaespaldas para poder moverse. “A mí que no me pongan guardaespaldas que lo que me gusta es el contacto con la gente. Estoy agradecida y emocionada con todo lo que me está pasando. Quién me iba a decir a mí que, a mi edad, estuviera recibiendo tanto cariño y tantas ofertas”.

Se han levantado voces críticas porque a los valencianos les va la vida en este ritual y tirar de personajes mediáticos les asusta, no quieren que sus fallas caigan en el friquismo. Las fallas son algo muy serio y tradicional. Por eso, esta agrupación fallera no goza del beneplácito de todas. Sólo tienen diez años de vida y se caracterizan por manejarse muy bien en el marqueting y en la publicidad. Si un año nombraron fallera mayor a la sobrina de Rocío Jurado, en pleno follón mediático, en esta ocasión han pensado en Lomana, que no para de firmar contratos publicitarios y hacer programas de televisión. Ha renovado contrato con Telecinco y tiene un manager que se ocupa de negociar los contratos. A ella le gusta una cámara más que a un niño una pelota.

Siguiendo con la equipación que le están preparando los joyeros escogidos han sido, Art Antic que le prestarán tres impresionantes aderezos, uno para cada traje, con un valor total de 12.000 euros. Luego ellos, por su cuenta, le regalarán una medalla de la Virgen de los Desamparados. Cada aderezo se compone de 20 piezas, entre peinetas, pinchos, broche o medallón. Todos los accesorios se hacen a mano y tal cual se creaban en el siglo XVIII. El tejido de sus trajes, que no son los codiciados espolines lo que encarecería a más del doble al ser hechos en telares a mano, supera los 10.000 euros. Un total de 34 metros de la mejor calidad con hilos de seda, oro y plata saldrá del taller de Vives y Marí, los mismos que fabricaron el de la infanta Elena, la seda del vestido de boda de la Infanta Cristina y suministran a Oscar de la Renta o Petro Valverde. Estos talleres junto a los de Catalá, que tejieron la seda del traje de la segunda boda de Letizia Ortiz, son los únicos manuales que sobreviven en Valencia de los 4000 que hubo y con los que suministraban seda a toda Europa. Carmen Asín, le está dando forma a las tres obras de arte que lucirá Lomana en su talla 40. El jueves 17 es la Exaltación. Los próximos 16,17, 18 y 19 de marzo lo dará todo por su falla. Junto a 400.000 personas, vestidas como marca la tradición de las mujeres pudientes del siglo XVIII y XIX,  se echará a las calles el día 17 de marzo, para hacerle la ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados, vestida con su traje valenciano de Alta Costura. Saludará, junto a Rita Barberá, desde el balcón del Ayuntamiento. Prenderá varias mascletás y tendrá el privilegio de indultar a un ninot de su falla antes de prenderle fuego. Quién sabe si indultará a la reina Sofía, que estará allí en forma de cartón piedra, junto a los futbolistas de la selección española.