Que Telefónica está dispuesta a ganar la batalla a Telecom Italia en su disputa por el control de GVT, la filial de telecomunicaciones de Vivendi en Brasil es un tema que no se pone en duda en este sector en medios internacionales. Cuenta con varias ventajas a su favor, además de su tamaño, liquidez y capacidad financiera, y es su capacidad para ofertar, en este caso al grupo francés, aspectos ligados a la industria y a los contenidos audiovisuales.

En medios franceses se indica que este tema se ha convertido en un punto a favor de la operadora española, en la medida de que el nuevo máximo directivo de Vivendi, Vicent  Bolloré, discrepa de la política seguida por su antecesor que negoció con Numéricable la venta de la filial de telecos SFR. Y parece además más proclive a quedarse en el sector, uniendo contenidos -mantiene el control de Canal+ con activos-. Un aspecto en que el coincidiría con la estrategia desarrollada por el presidente de Telefónica, César Alierta.

Y  hay más: en la propuesta de la operadora con sede en Madrid, se incluiría su participación superior al 8% de Telecom Italia. Es, asimismo, una forma de contrarrestar el plan del grupo transalpino que contempla la posibilidad de que la operadora gala se quede con una presencia de hasta el 20% de sus acciones, como sistema para sortear sus dificultades financieras para hacerse con GVT, y sumarla a su filial brasileña TIM.

La semana próxima es clave en este proceso. El consejo de administración de la italiana se reúne el 27 de agosto, mientras que el de Vivendi está convocado para un día después. Telecom Italia intenta hacerse con apoyos de accionistas independientes para desarrollar su estrategia, con la ventaja de que Telefónica no está en el consejo, si bien se pueda instar a que la operación se lleve a una junta extraordinaria.