El Banco de Portugal ha solicitado a la dirección de Novo Banco, que agrupa los activos saneados del Banco Espírito Santo (BES) tras su escisión a principios de agosto, la elaboración de un plan que ayude a captar inversores que puedan formar una estructura accionarial «estable y comprometida»  con el desarrollo de la entidad.

La dirección de Novo Banco, encabezada por Vítor Bento, presidente ejecutivo de la entidad, se reunió este martes con el gobernador del Banco de Portugal, Carlos Costa, para informarle de la situación del banco y sobre la ejecución del proceso de transición.

En dicho encuentro, el gobernador del banco central luso instó a la dirección de Novo Banco a «elaborar un plan enfocado al desarrollo sostenible del banco que contribuya a atraer a inversores que puedan formar una estructura accionarial estable y comprometido con su desarrollo».

A este respecto, Novo Banco indicó que llevará a cabo los contactos necesarios para concretar esta estructura accionarial de manera coordinada entre la dirección y los consultores financieros contratados a tal efecto.

Por otro lado, la dirección de Novo Banco informó al Banco de Portugal de la evolución del proceso de transición iniciado por la entidad, que incluye un cambio de imagen, con el objetivo de normalizar la relación de Novo Banco con sus clientes, «un proceso que también implica la redefinición de la oferta y el posicionamiento estratégico de la institución».

Asimismo, los directivos del ‘banco bueno’ creado el pasado 3 de agosto tras la escisión de BES indicaron al gobernador del Banco de Portugal la existencia de evidencias de una «renovada confianza».