El Deutsche Bank, uno de los grandes grupos financieros de Europa, es prácticamente el único superviviente de la banca extranjera en el mercado minorista. Justo cuando el Barclays Bank ha vendido su negocio de banca comercial a CaixaBank, y Citi ha hecho lo mismo con el Banco Popular, el Deustche celebra 125 años en España consolidándose como la  primera institución financiera extranjera.

En realidad, en 1889 el que llega a España en 1889 es la Bankhaus Arthur Gwinner Co, una de las entidades de lo que es ahora el grupo Deutsche Bank, para financiar el alumbrado público de Madrid, que había ganado en concesión el grupo alemán Allgemeine Elektricitäts Gesellschaft (AEG).

En 1904, el Deutsche Ueberseeische Bank, filial del grupo, funda en Barcelona el Banco Alemán Transatlántico. Tres años más tarde, abre sucursal en Madrid, y en 1928 en Sevilla.

Tras la II Guera Mundial, todas las propiedades alemanas en España fueron congeladas. En 1950 se creó una nueva sociedad, Bancotrans, que se hizo cargo de los bienes del Banco Alemán Transatlántico. Posteriormente, Deutsche Bank entró en el accionariado de Bancotrans y en 1988 alcanza la mayoría del capital. En los años 90, Bancotrans crea filiales de seguros, planes de pensiones y financiación al consumo. En 1993 completó su red de oficinas de banca comercial, hasta entonces centrada sobre todo en Cataluña, Levante y Baleares, con la compra del Banco de Madrid al Banesto de Mario Conde. Un año más tarde, la entidad cambió su marca comercial por Deutsche Bank.

En este proceso, otros bancos extranjeros han abandonado la banca comercial en España: Crédit Lyonnais, BNP Paribas, Chase Manhattan Bank, Natwest, Lloyds, y una larga lista. Sólo aguantan los portugueses Caixa Geral y Finantia Sofinloc, y el holandés ING Direct. El resto está en banca de gestión de patrimonios o en banca de inversión. Y solamente ha entrado el venezolano Banesco, primero en el Banco Etcheverría y luego en NCG Banco, rebautizado como Abanca y que se integrará con éste.

250 oficinas más Correos

El Deutsche Bank, dirigido desde 2004 por Antonio Rodríguez-Pina como presidente y consejero delegado, tiene cuatro áreas:

1.-Particulares y Empresas (Private and Business Clients), con 250 sucursales, más BanCorreos, la alianza con el operador postal que permite ofrecer servicios financieros en más de 2.000 oficinas de la empresa pública.

2.-Gestión de activos y de patrimonios (Asset and Wealth Management): la primera aporta 6.361 millones de euros, la segunda, un volumen de 4.500 millones y 990 grupos familiares.

3.-Banca de inversión (Corporate Banking & Securities), donde es la primera entidad extranjera.

4.- Banca Transaccional (Global Transaction Banking) ofrece productos de comercio exterior, gestión del riesgo, tesorería y custodia de valores a grandes empresas, filiales de multinacionales, pymes e instituciones financieras.