«Yo hablo, hablo, hablo…, pero no soy nadie, no tengo fuerza ni poder de decisión y lo que digo les hará reír porque son ellos los que deciden, por eso no vale la pena perder el tiempo hablando de lo mismo», señaló el luso en rueda de prensa.
El técnico lamentó que con algunas decisiones se les «complica la vida» y volvió a poner un ejemplo de las cosas que se hacen «para engañar un poquito», como el hecho de que esta jornada «el Málaga juegue el lunes y luego jueves» contra el Real Madrid.
«Algunos tienen la vida más fácil, más estructurada, parece que escogen cuando quieren jugar. Son privilegios que nosotros no tenemos, pero hay que seguir», sentenció, sin querer decir quienes son los que tienen esos privilegios: «Los amigos de quien decide. Sabes tanto como yo. Y nosotros no somos».
«Si hubiera amarillas también nos las sacarían»
Por otra parte, defendió a su plantilla por ser una de las más tarjeteadas de la historia del club. «Es muy fácil sacar tarjetas a nuestros jugadores, no hay un criterio uniforme y por acciones idénticas hay equipos con muchísimas tarjetas y otros están más protegidos», reiteró.
«Basta con mirar las dos últimas semanas para ver lo fácil que Casillas se ha ido a la calle y otros no. Ser transforman rojas en amarillas y amarillas en no tarjetas y para nosotros lo que es amarillo es rojo, lo que no es nada es amarillo… y porque no existen naranjas, que si no también las tendríamos», añadió.
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