El peor, el Ibex

02/03/2011

Miguel Larrañaga. 02-03-2011

Nadie en su sano juicio podía esperar otra cosa que una apertura bajista de esas que hacen época tras lo sucedido la víspera en Wall Street. Y por una vez el pronóstico se cumplió. Caída al infierno en la apertura y mañana de pasión de las buenas. El rojo dominaba más que en la alfombra de los Oscar, aquí y en el resto de Europa.

Pero a media mañana el ídncie menos esperado empezó a dar síntomas de que quería algo distinto para el día de hoy: el Mibtel italiano. Si hay algún país al que lo de Libia le preocupe. ése es Italia. Si hay algún país al que una subida de tipos de interés puede hacerle daño, ése es Italia. Si hay algún país caracterizado por el descontrol de casi todo, ése es Italia. Pues a pesar de todos los pesares, el Mibtel se arrancó cuando menos se esperaba y dejó atónitos a todos.

Poco después, el índice que más ha renqueado en los últimos tiempos decidió sumarse a un renacido optimismo o, vaya usted a saber, una maniobra desesperada. El Footsie londinense optó por desmarcarse y comenzar la ardua tarea de recuperar desde mínimos, mientras el Dax, el CAC y, sobre todo, el Ibex se quedaban mirando. ¿Por qué arrancó? Tengo para mí por cierto que se trata de una reacción técnica tras tocar de nuevo zonas conflictivas de soporte. Días atrás el Dax marcó una maniobra muy parecida y al día siguiente estalló al alza. ¿Intentará lo mismo el índice británico? Ya saben que no tengo bolita de cristal, pero creo que no están las cosas como para esperar machadas por parte de nadie.

Una apertura extrañamente alcista en Wall Street (después de lo caído el día anterior la sorpresa no era ir hacia arriba, sino la verticalidad de esa primera hora de mercado) puso los ingredientes necesarios para que aquellos que habían apostado por intentar cerrar en verde encararan la última hora de negociaación ya en positivo, mientras el CAC y el Da avanzaban a paso cansino y de la mano hacia arriba y el Ibex iba a peor, mientras los índices americanos iban hacia arriba el selectivo español iba hacia abajo. Los misteros del Ibex son inescrutables. En él todo es cuestión de fe y hoy parecía tener bastante poquita.

En fin, que otro día será porque hoy tampoco han tocado alegrías por parte del selectivo español, que al cierre cayó un 1,10%. Tampoco el Dax y el CAC estuvieron demasiado finos y perdieron un 0,58% y un 0,81% respectivamente, mientras el Footsie británico luchaba a brazo partido por cerrar en positivo, pero al final se tuvo que conformar con limitar las pérdidas al 0,35%.

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