Las negociaciones entre la familia Koplowitz, principal accionista de FCC, con la sociedad Carso, controlada por el financiero mexicano Carlos Slim, podrían estar en la fase última, por lo que los resultados de estas conversaciones pasarían a ser examinados de forma inminente por el consejo de administración de la compañía de infraestructuras.

La realidad es que la plasmación del pacto de forma inmediata es casi imprescindible, por más que a Esther Koplowitz, que controla el 50,1% de la empresa a través de la sociedad B 1998, haya logrado ayer un retraso para el pago de los compromisos financieros de la citada firma que se encuentra en default.

Los acuerdos, incluido el pactado este miércoles, de la banca acreedora con B 1998 están supeditados a que FCC logre la entrada de un socio institucional que garantice la ampliación de capital, con un porcentaje en el entorno al 50%. Y es que con la venta de los derechos preferentes de la operación Esther Koplowitz podrá hacer frente a los pagos pactados con la banca de una deuda que se acerca a los 1.000 millones de euros.

SI bien en un panorama en el que todo está relacionado, existen más temas pendientes de que se oficialice la entrada de Slim, una vez que las negociaciones con Georges Soros se rompieron el pasado fin de semana. Está, por tanto, la quita, que ha sido aceptada por la mayor parte de la banca acreedora de la empresa, en el tramo B de la deuda, que se eleva a 1.350 millones, y que quedaría en 1.000 millones. Cantidad por la que se hará la ampliación aprobada por la junta de accionistas de FCC el pasado 20 de noviembre.

Otra cuestión relevante vuelve a ser el precio al que se realice la ampliación, es decir, el descuento respecto a la cotización, ya que de él depende la futura composición de capital de la empresa. O lo que es lo mismo, si Slim comparte poder con la familia Koplowitz o si intenta hacerse con el control. Fue el tema que llevó a la rúptura con Soros, que había adelantada por el consejero delegado de FCC, Juan Béjar.

Los términos en los que ahora se realizan la negociación apuntan a que el financiero mexicano se quedará con alrededor del 25% del capital y Koplowitz, con el 23,5%, lo que supondrá de confirmarse que Slim se convertiría en el primer socio institucional de FCC.