El informe de los peritos sobre Bankia pone de manifiesto que ni las cuentas de 2011 ni las reformuladas posteriormente cumplieron la circular 4/2004 y 3/2008 del Banco de España como consecuencia de los errores contables. También, el el afloramiento de activos ‘tóxicos’ como las inversiones en el Valencia CF o en Terra Mítica además de operaciones inmobiliarias dudosas. En total, 13.224 millones de euros de riesgo dudoso no contabilizado como tal.

Además, el informe de los peritos del pone de manifiesto que la colocación dependió de que empresas vinculadas como Mapfre o Ahorro Corporación sostuvieran el valor en su salida. “El informe concluye que no hubo concurrencia. O dicho de otra manera: si ellos mismos no hubieran garantizado la salida a Bolsa, ésta no se habría producido”, interpreta Juan Ignacio Navas, socio-director de Navas & Cusí, uno de los despachos más activos en las reclamaciones por la colocación de Bankia.

El bufete considera que el informe pericial supone una importante prueba para demostrar que el inversor compró acciones de Bankia “con una información adulterada de su situación económico-financiera”, lo que hace nula la adquisición de las acciones por ocultarse información relevante sobre el estado de financiación real de la sociedad cotizada. “Es lo que ya estaban resolviendo los jueces; pero tras el informe pericial, la evidencia es mucho más palpable”, concluye Navas.

Navas & Cusí considera que el informe pericial va a disparar las demandas de nulidad de quienes acudieron a la colocación. “No se puede alegar que conocían el riesgo porque actuaron sobre unas cuentas que claramente no reflejaron la imagen fiel de la situación económico-financiera de la entidad”, subraya Navas, quien también lamenta que “desgraciadamente fallaran todos los instrumentos de control”.

Demanda de nulidad

Navas & Cusí ha ganado una demanda de nulidad de colocación de acciones de Bankia. El juzgado nº 67 estimó que la falta de información afectó “a la solvencia de la entidad emisora que fue facilitada”. La sentencia pone de manifiesto que desde la salida a Bolsa el 20 de julio de 2011 a la solicitud de suspensión de la CNMV el 25 de mayo de 2012, “la entidad pasa de presentar unas cuentas cuyos activos totales se situaban en torno a los 305.000 millones de euros a interesar un rescate de 19.000 millones de euros. Circunstancia que pone de manifiesto una actuación dolosa por parte de la entidad demandada al facilitar a sus clientes una incorrecta información contable, y aparentar una situación de solvencia que no se correspondía con la realidad”. Bankia optó por no recurrir el fallo judicial.