Empleados de Coca-Cola denuncian el desmantelamiento de la planta de Fuenlabrada

15/01/2015

Luis M. del Amo. Los enfrentamientos entre la plantilla y las fuerzas de seguridad terminan con tres heridos y un detenido.

cocacola_265El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) ha denunciado este jueves la fuerte presencia policial en las inmediaciones de la planta del embotellador de Coca-Cola en Fuenlabrada (Madrid). Según el sindicato, la presencia policial tendría como fin garantizar un “posible” desmantelamiento de la planta, ante lo cual la central hja convocado una concentración a las puertas de la fábrica madrileña.

Dos furgones policiales han penetrado esta mañana en la planta de Coca-Cola Iberian Partners en Fuenlabrada, acompañando a personas “ajenas” a la plantilla y con la “posible” intención de desmantelar la planta del embotellador único del refresco, según ha denunciado el ‘número dos’ de Comisiones, Ramón Górriz.

La presencia policial ha derivado en enfrentamientos entre los efectivos de las fuerzas de seguridad y miembros de la plantilla, que han terminado con tres personas heridas y un detenido, advierten en otras fuentes.

Sentencia de la Audiencia Nacional

CCOO ha lanzado críticas a la policía a la que acusa de actuar como “gendarmes de la dirección de la empresa”. El sindicato ha recordado la sentencia de la Audiencia Nacional, que el pasado noviembre ordenó a la empresa, o bien reintegrar a la plantilla a sus puestos de trabajo, o bien pagarles sus salarios, aun sin prestar ningún servicio.

El sindicato defiende que esta sentencia obliga a la empresa a abrir de nuevo la planta de Fuenlabrada. “La policía debería garantizar el cumplimiento de la ley”, ha afirmado hoy Górriz. “O lo que es lo mismo cumplir la sentencia”, ha rematado.

También el Comité de Empresa ha denunciado la presencia de trabajadores externos a la planta esta mañana, protegidos por las fuerzas de seguridad, con el fin de desmantelar la fábrica, afirma la agencia Efe.

En noviembre, la Audiencia Nacional ordenó la ejecución provisional de la sentencia que anulaba el expediente de regulación de empleo (ERE) de la embotelladora de Coca-Cola. La decisión judicial suponía que la compañía tenía que decidir si reincorporaba a unos 350 trabajadores a sus puestos de trabajo, o les mantenía en casa, pagándoles sus salarios, en tanto no hubiera una sentencia firme.

De los 350 trabajadores a los que afecta la sentencia que declaraba nulo el ERE de Coca-Cola, unos 60 han aceptado los nuevos puestos asignados por la compañía, añade la agencia; cuarenta de ellos pertenecen a departamentos comerciales.

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