Después de presentar unos resultados que suponen el 50% más que el año anterior, superando las previsiones internas del plan estratégico 20141-16, lo normal sería lanzar las campanas al vuelo. Pero el Sabadell no lo hace. Su presidente, Josep Oliu, incluso parece reprochar esta actitud a la competencia: “Nosotros no hacemos triunfalismo con las provisiones”. Y eso que en 2014 ha destinado 2.500 millones de euros a esta partida, pese a que la morosidad lleva cinco trimestres consecutivos de descenso, y el saldo de dudosos, cuatro.
Oliu menciona las incertidumbres internacionales (Grecia, Ucrania, el conflicto en Oriente Medio, las elecciones en Italia y Gran Bretaña, el débil crecimiento en Europa), las nacionales (elecciones autonómicas y locales en mayo, las catalanas en septiembre, las generales en diciembre), y que se requiere una demanda solvente mientras debe continuar el desendeudamiento de empresas, familias y, sobre todo, del sector público.
«No por haber crédito más barato hay una gran demanda de hipotecas«, señala el presidente del Sabadell, que insiste en que la economía española está empezando justo ahora a tomar aire, por lo que las familias y las empresas necesitarán aún un tiempo para ver mejorada su situación.
El Sabadell dará más crédito, especialmente a las pymes, por lo que el saldo neto crecerá entre el 1% y el 2%. Pero Oliu rechaza que la banca haya iniciado una ‘guerra’ por el crédito, sino que se está reduciendo el «retraimiento» a dar financiación tras siete años de crisis.
El consejero delegado, Jaume Guardiola, avisa: «no se trata de rebajar las condiciones de análisis de los riesgos». Pero en 2014 la nueva producción de hipotecas crece el 69%, el número de operaciones el 55%, y el crédito neto a empresas, el 5,7%.
Además del crédito, el margen de intereses y los ingresos por comisiones continuarán aumentando a un ritmo similar al de 2004: 24,5% en el primer caso, 13,3% en el segundo.
La reducción de activos dudosos se acelerará. En 2014, por primera vez desde que se iniciara la crisis, la entrada de activos problemáticos se ha ido reduciendo, trimestre a trimestre.
Y las ventas de activos también aumentarán, después de haber superado en un10,3% los objetivos previstos para el primer año del Plan Triple: 2.744 millones de euros, 16.172 unidades.
Oliu cree que “ha finalizado esta etapa de integración en el sistema financiero español”, y ahora se abre un «nuevo escenario». “Nosotros no prevemos operaciones corporativas, aunque siempre estamos abiertos a estudiar las oportunidades que puedan surgir”.
Factores políticos
El presidente del Sabadell elude valorar el adelanto electoral en Cataluña y que los comicios tan un supuesto carácter plebiscitario. Pero sí deja claro que el debate soberanista en Cataluña no ha afectado al banco. “Lo hemos mirado mucho y no hemos notado nada ni fuera ni en Cataluña”, precisa Oliu, que subraya que el banco ha captado 400.000 clientes (349.682 particulares y 95.927 empresas) en 2014.
Oliu también afirma que no le da «miedo ninguna fuerza política», sino la posibilidad de que en cualquier territorio se genere una situación de «ingobernabilidad». «Da más miedo una ingobernabilidad que gane un determinado partido. Eso no nos da miedo”, resalta.
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