El despacho Navas & Cusí ha presentado una reclamación ante el Defensor del Pueblo Europeo quejándose de la pasividad de la Comisión Europea ante la “urgencia” de afrontar las malas prácticas de la banca en España. La reclamación recuerda que todavía hay 10 casos españoles pendientes en el Tribunal Europeo de Luxemburgo y que el asunto es de “extraordinaria urgencia porque está destruyendo la cohesión y el tejido económico en España y Europa”.

El bufete califica de “inane” la actitud de la Comisión Europea, a la que acusa de pretender “sofocar con su falta de decisión este problema”. “No es un problema exclusivamente español. Desgraciadamente hay un mercado único de malas prácticas bancarias. Tampoco en Hungría, Eslovaquia, Polonia, Rumanía y Croacia se aplica la jurisprudencia del Tribunal de la Unión Europea en materia de cláusulas abusivas”, lamenta Juan Ignacio Navas, socio-director del despacho.

La reclamación considera además que la pasividad de la Comisión Europea supone una “legitimación formal y de hecho de las malas prácticas bancarias permitidas a los bancos”. Además, lamenta que tampoco se permita el control jurisdiccional: “Los jueces no disponen de medidas provisionales a adoptar a instancias del deudor fuera de las ejecuciones”.

Queja por incumplimiento en 2013

El bufete presentó en 2013 una queja ante la Comisión Europa por incumplimiento de España de la legislación comunitaria de protección del consumidor de productos financieros y bancarios y por la pasividad de los organismos de control: Banco de España y CNMV. “Esta queja fue incorporada al diálogo estructurado y procedimiento de infracción, del que nunca más se ha vuelto a saber”, lamenta Navas.

De hecho en la reclamación ante el Defensor del Pueblo Europeo se exigen explicaciones por el silencio de la Comisión Europea ante la segunda ampliación de la queja, “de la que ni siquiera tenemos acuse de recibo desde que la presentamos el pasado mes de septiembre”.

En diciembre de 2014 presentaron una petición ante el Parlamento Europeo para que la Comisión Europea explicara su silencio “ante un asunto de alarma social en España y en Europa como consta los numerosos expedientes administrativos y judiciales abiertos ante las instituciones comunitarias”, señala la reclamación ante el Defensor del Pueblo Europeo. “Esperamos que esta instancia desbloquee a una Comisión Europea que debería velar por el cumplimiento de los tratados y que sin embargo está mostrando una pasividad cómplice”, concluye Juan Ignacio Navas.