En el debate sobre la hipotética sucesión de Rodríguez Zapatero  como candidato en 2012 a la presidencia del Gobierno, el presidente del Senado, el socialista Rojo, ha sido tajante: Zapatero debe seguir. Rojo entiende que el presidente “no se ha puesto de perfil ante la compleja situación  de la economía española” y que está tomando decisiones, “acertadas o algunas puede que equivocadas” pero que está asumiendo riesgos. Sin citarlo, se refirió a Mariano Rajoy de quien dijo que no decide nada, “hace que otros decidan y si el resultado es bueno, lo hace suyo y el fracaso se lo traslada a quien lo hizo”.

Después de señalar que no se debe cambiar el modelo autonómico “porque es lo que ha hecho posible el progreso económico, social y político de todo estos años” y de apuntar que no hay que “devolver competencias al Estado” sino reforzar la cooperación y la colaboración entre las distintas administraciones, Rojo dijo que sigue siendo ineludible la reforma del Senado y que “todo el tiempo que se retrase esa amplia reforma constitucional, será tiempo perdido”.

Para el presidente del Senado el debate sobre los llamados ‘privilegios’ de los parlamentarios es falso porque estos no existen realmente, pero al tiempo se mostró partidario de endurecer al máximo el régimen de incompatibilidades entre la actividad parlamentaria y otras. En su opinión, los parlamentarios lo deben ser a tiempo completo y solo poder llevar a cabo actividades políticas paralelas u otras relacionadas con trasladar a la sociedad su visión de la misma. Por eso señaló como compatibles solo la docencia o las conferencias e intervenciones públicas en distintos foros.

“El resto de actividades no debe poder llevarlas a cabo un parlamentario”, afirmó, para a continuación mostrarse partidario de la máxima transparencia sobre los bienes y el patrimonio de los parlamentarios pero no sólo de éstos sino de “todos los que estén en la vida pública”.

Por lo que se refiere a la lucha contra el terrorismo, Rojo reivindicó la actuación del Gobierno de la anterior legislatura en esa materia porque “la situación actual es producto de lo que se hizo entonces” y destacó que en la actualidad “existe unidad democrática”, lo que “multiplica por cien la efectividad de las medidas tomadas”. Sobre la presencia o no de Sortu en las próximas elecciones el presidente del Senado pidió que siga actuando el Estado de derecho y que la policía, los fiscales y la abogacía del Estado sigan haciendo su trabajo para conseguir que “no se repita lo que ocurrió en Mondragón” cuando, tras un atentado con víctima, “la alcaldesa de esa localidad no su puso a la cabeza del movimiento de repulsa y rechazo de dicho atentado”.