El conocido hasta ahora como Parque Forestal de Valdebebas, en el nuevo barrio de este nombre al noreste de la capital, ha abierto sus puertas ya renombrado como Parque Forestal Felipe VI.
Se podrá visitar sólo hasta las 18.00 h. en abril y hasta las 21.00 h. en mayo. ‘El horario responde a motivos de seguridad’, dicen en el Ayuntamiento de Madrid.
Con 470 hectáreas de superficie, el Parque Felipe VI está constituido por el parque forestal, de 340 hectáreas, una planta de compostaje de elementos vegetales, el arroyo Valdebebas y viveros municipales, con otras 50 hectáreas, así como el parque «periurbano», de 80 hectáreas, que se ha construído siguiendo el diseño ganador del concurso internacional de ideas desarrollado al efecto.
Es cuatro veces mayor que el Retiro, y que será el segundo parque en extensión de la ciudad, detrás de la Casa de Campo. Además el Ayuntamiento está creando las condiciones adecuadas para el desarrollo y procreación de liebres, conejos, topos, zorros y de multitud de reptiles y anfibios.
Queda definido como la silueta de un gran árbol, cuyo tronco, el eje central del parque, discurre entre amplios paseos, siendo accesible a todo tipo de público y contando con una clara finalidad didáctica y en las zonas próximas a los núcleos urbanos se han diseñado parques lineales, cómodos y dotados con el equipamiento necesario para la práctica de deportes o el paseo.
El agua es especialmente importante y el objetivo en Valdebebas es su gestión sostenible. Para ello se ha creado un sistema basado en la diversificación de orígenes, la regulación y el aprovechamiento de los recursos propios. Se ha recurrido a sistemas de riego eficientes y de bajo consumo al emplear agua regenerada a sistemas de recogida de agua de lluvia para procurar el máximo autoabastecimiento de agua.
El parque está construido sobre eriales, antiguas zonas de cultivo y grandes vertederos y escombreras en el distrito de Hortaleza, dentro del desarrollo urbanístico Ciudad Aeroportuaria – Parque de Valdebebas. Rodeado de grandes infraestructuras, linda al norte con el Arroyo Valdebebas, que da nombre al entorno , y con la R-2, al este con la terminal 4 del aeropuerto de Barajas y la M-12, al sur con el barrio de Las Cárcavas y la M-11, y al oeste con la M-40, que lo separa del barrio de Sanchinarro.
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