La historia da vueltas y los protagonistas se vuelven a encontrar varias veces. Iberdrola niega, y es natural, que la entrada en su capital del fondo soberano qatarí tenga algo que ver con su deseo de impedir que ACS alcance una posición dominante en la eléctrica española. Según Iberdrola la incorporación de Qatar Holding viene a reforzar la estrategia de la compañía y le permite llevar a cabo en mejores condiciones para todos su proceso de absorción de Iberdrola Renovables en la medida en que no tiene que hacer otra ampliación de capital, adquirirá las acciones para el canje en el mercado, y ha elevado ligeramente el precio de la operación ya que ahora el cambio será de media acción de Iberdrola por cada una de Renovables cuando la semana pasada lo había fijado en 0,40 acciones de Iberdrola por una de la filial.

La búsqueda del dinero de los fondos soberanos árabes para que entren en el capital de empresas españolas lleva desde hace tiempo. Ha dado algún resultado como la compra del 5% de Santander Brasil y el anuncio hace dos semanas por parte del presidente del Gobierno Rodríguez Zapatero de que el fondo invertirá en telecomunicaciones, se supone que en Telefónica; energía, se ha concretado la operación en Iberdrola, y en algunas cajas de ahorros, aun sin conocer en concreto.

Pero no han sido solo las empresas españolas las que buscan esos socios. Hochtief, la constructora alemana que no quería que ACS superara el 30% de su capital y mucho menos que llegara al 50% como se ha fijado como objetivo, alcanzó en medio de la pelea un acuerdo con el holding para hacer lo mismo que en Iberdrola. En esa ocasión la alemana amplió capital en un 10% que fue suscrito íntegramente por el fondo árabe. Se trataba de una operación claramente defensiva, aunque se negó en su momento. Ahora suscribirá una ampliación en Iberdrola por el 6% y comprará algo de autocartera.

A los alemanes no les sirvió de nada la operación. ACS consiguió superar el listón del 30% en la constructora y a partir de ahí ha ido incrementando su presencia y en la actualidad está por encima del 34%. Y mantiene unas buenas relaciones con los gestores del fondo qatarí. De hecho, tanto ACS como la propia Hochtief tienen una importante cartera de pedidos para llevar a cabo obra civil en Qatar y previsiblemente lo harán en paralelo.

La entrada en Iberdrola supone una dilución del paquete accionarial de ACS en algo más de un uno por ciento. En la actualidad tiene algo más del 20%. En paralelo, los otros dos grandes accionistas de la eléctrica, Bankia (a través de la participación que tiene Bancaja) y la BBK también se diluyen. La entrada de un ‘caballero blanco’ es positiva en la medida en que viene a reforzar al equipo gestor que lo ha buscado, pero también puede volverse en su contra. En fuentes cercanas a ACS señalan que “lo mismo los amigos que se han buscado resulta que son más amigos de otros”, refiriéndose a las buenas relaciones que existen entre Qatar Holding y la constructora española que en absoluto se han visto empañados por la operación en Alemania, “sino más bien lo contrario”.

Para la constructora española “parece evidente” que Ignacio Sánchez Galán mantiene su carrera para quitarse la presión que siente le hace el principal accionista de la eléctrica sin conseguirlo. Confían en poder trabajar juntos con los qataríes.