La junta de accionistas que Bankia celebra el 22 de abril hará historia. Por vez primera su corta pero turbulenta historia, a la que se añade ahora la acusación a su ex presidente Rodrigo Rato de cinco delitos fiscales, alzamiento de bienes y blanqueo de capitales, la entidad nacionalizada aprobará el pago del primer dividendo. El consejo de administración propuso el pago en efectivo de 1,75 céntimos de euro por acción con cargo a los beneficios del ejercicio 2014.

Bankia pagará, por tanto, a sus accionistas 202 millones de euros. El Estado, que a través de BFA Tenedora de Acciones (100% del Frob), es el mayor accionista de Bankia, con el 62%, recibirá más de 126 millones.

La entidad pagará un dividendo sus accionistas apenas dos años desde su recapitalización, a finales de mayo de 2013. “Eso no lo ha logrado en tan corto espacio de tiempo ninguna otra entidad que ha atravesado por la misma situación«, señala el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en el tradicional encuentro con los medios de comunicación previo a la junta.

Goirigolzarri cree que el Frob no tiene «ninguna ansiedad» porque BFA inicie el pago de un dividendo, como ha hecho Bankia, para oficializar la recuperación de las ayudas públicas. “No es una cuestión prioritaria”, insiste.

“Un paso más, quizá pequeño, pero significativo”, según el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, para avanzar en la devolución de las ayudas públicas recibidas para el saneamiento de la entidad. BFA-Bankia recibió 17.959 millones a través del Memorándum pactado con Bruselas, más otros 4.465 millones inyectados directamente por el Estado.

BFA ya recuperó 1.304 millones de euros tras la venta de un 7,5% de Bankia en febrero de 2014, en el inicio de la privatización de la entidad.

El Frob confía en que la revalorización en Bolsa de Bankia rebaje la factura total de las ayudas públicas concedidas al sector financiero español. Su 62% en Bankia vale ahora  unos 9.000 millones.

Como ya hizo su consejero delegado, José Sevilla, en un seminario de la Apie, Goirigolzarri elude el debate sobre si hay que vender ya otro paquete de Bankia o esperar al nuevo Gobierno, y condiciona la operación a la evolución de la Bolsa. “No creo que estén encima de la mesa argumentos electorales. Si no tienes un argumento económico, el factor político no juega”, razona.

Bankia cerró la sesión previa a la junta en los 1,234 euros, con una subida del 0,82%, pero todavía muy lejos de los 1,51 euros con los que se colocó el primer paquete de las reprivatización.