Este jueves ha terminado la presentación del plazo de solicitud para gestionar las primeras trece torres de control de AENA que el Gobierno quiere privatizar, en el primero de los tres paquetes previstos que sacarán al sector privado el 49% de los Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena). El gestor aeroportuario ha confirmado que, en total, han sido diez las empresas que han presentando su solicitud.

Esta respuesta ha superado las previsiones, ya que inicialmente solo se esperaba que fueran cuatro los grupos, que desde que en diciembre pasado se hizo pública la intención de privatizar casi la mitad de Aena, hubo un gran movimiento en el sector de proveedores de servicios aeroportuarios para alcanzar alianzas y acuerdos. De esta forma, las solicitudes más potentes estarían encabezadas por Ferrovial, FCC, ACS e Indra, según publicamos en diarioabierto.es este martes.

A estos grupos conocidos se han sumado el día que finalizada el plazo de solicitudes otras seis, entre las que cabe destacar Sacyr, junto a Saerco, Geci Española, Etracontrol, Servicios de Control de tránsito y navegación Aérea y Letové Prevadzkove Sluzby Slovenskej Republiky.

Como se recordará los primeros centros de control de tráfico aéreo que serán privatizados se encuentran en los  aeropuertos de Alicante, Valencia, Ibiza La Palma, Lanzarote, Fuerteventura, Sevilla, Jerez, Sabadell, Cuatro Vientos, Vigo, A Coruña y Melilla.

Según explica el gestor aeroportuario, todas las empresas, excepto Letové Prevadzkove Sluzby Slovenskej Republiky, que sólo opta al tercer lote, han mostrado su interés por optar a los tres lotes en que se dividirán las 13 torres.

El primer lote comprende las torres de los aeropuertos de Alicante, Valencia, Ibiza y Sabadell, mientras que el segundo Sevilla, Jerez, Vigo, La Coruña y Cuatro Vientos, y el tercero Lanzarote, Fuerteventura y La Palma.

Según el procedimiento previsto para la adjudicación, a partir de este mismo jueves Fomento y Aena analizarán la documentación presentada, descartándose aquellas que no cumplan con los requisitos establecidos de solvencia técnica y económica que, no obstante podrían participar en la segunda fase del concurso de privatización.

Una vez seleccionadas todas las empresas, se las pedirá que presenten su oferta, en la que deben aparecer desde las condiciones técnicas de cómo prestará los servicios, en función a lo establecido por Aena en los pliegos del concurso, hasta la valoración económica.

Una vez recibidas todas las ofertas, comenzará la segunda fase del concurso, donde las empresas que sigan interesadas deberán acreditar que están certificadas según exigen los requisitos establecidos en los reglamentos europeos, y que también el Gobierno ha incluido en el Real Decreto que regula el procedimiento a seguir en la certificación de proveedores civiles de servicios de navegación aérea, que fue a aprobado el 23 de julio de 2010.

Una vez superado ese procedimiento, Fomento y Aena tendrán un plazo de cinco meses para seleccionar a los proveedores de cada uno de los lotes.

Cada empresa elegida podrá realizar su gestión en durante cinco años, que podrán ser prorrogados otro ejercicio más.

Los pasajeros, los más beneficiados

Según ha explicado Aena, los pasajeros serán los “grandes beneficiados” de la privatización de las torres de control, porque su gestión privada supondrá una mejora del servicio, dado que se exigirá a la empresa adjudicataria parámetros de calidad, incluido el de la puntualidad.

Otra de las ventajas de la privatización será la reducción de costes de la navegación aérea en España, lo que facilitará a las empresas ser más competitivas, sin que por ello se pierdan niveles de seguridad, continúa explicando el ente gestor.

De momento, las primeras torres de control que serán privatizadas han sido seleccionadas por el Ministerio de Fomento, tras el análisis llevado a cabo por la propia Aena, en el que se incluían aspectos tan fundamentales como el volumen de tráfico, aquellas donde no hay control de aproximación, la complejidad del centro, aquellas bases aéreas donde no pueden hay tráfico civil, o los que el proveedor de servicios es el Ministerio de Defensa o que no hayan sido designados para el servicio de información de vuelo de aeródromos AFIS.

El ministro de Fomento, José Blanco, además ya ha desvelado que las “joyas de la corona” de Aena, los aeropuertos de Madrid-Barajas y el Prat de Barcelona, seguirán este mismo proceso de privatización antes de que finalice este año. Los dos aérodromos son los que más tráfico aéreo tienen en toda España y de los pocos con ofrecen beneficios en la actualidad.

Alianzas y acuerdos

Hasta el momento, se sabe que Ferrovial, la compañía española con más experiencia en la gestión privada de aeropuertos al estar presente en seis aeródromos británicos, ha llegado a un acuerdo con la también británica Nats para entrar en la puja, e indirectamente entrará su filial de aeropuertos BAA.

Por su parte, ACS ha formado alianza con Austro Control, compañía de origen austriaco, dedicada a prestar servicios de navegación aérea en Austria, y servicios de control de torre en nueve aeropuertos de Alemania. Además, es el único proveedor nacional certificado bajo el marco del Cielo Único Europeo, que presta servicios en otro Estado de la UE, además de en su propio territorio. Por su parte, la compañía que preside Florentino Pérez entraría en la puja a través de su filial Clece con la que lleva cinco años realizando servicios aeroportuarios, tanto de ‘handling’ (en los aeródromos de Málaga, Lanzarote y Fuerteventura), como de atención a viajeros en las terminales.

FCC ha alcanzado un acuerdo con la sueca LFV por el que la compañía que preside Esther Koplowitz creará una sociedad conjunta con LFV en la que controlará el 65% del capital mientras la sociedad sueca tendrá el 35% restante. LFV, es la empresa pública que ofrece los servicios de navegación aérea civil y militar de Suecia, cuenta con una plantilla de más de 1.400 controladores aéreos y opera en 41 torres de control de aeropuertos suecos, así como en los centros de control aéreo de Estocolmo y Malmö y en un centro de planificación de vuelos. Por su parte, la compañía española  persigue reforzar su posición en el sector de servicios aeroportuarios, en el que está presente a través de su filial de handling Flightcare, con la que incluso opera en algunos de los aeropuertos cuyas torres serán liberalizadas.

Y, finalmente Indra se ha aliado con el proveedor de navegación aérea alemán DFS. Entre ambas compañías han creado la Tower Air Traffic Services (Tower ATS), sociedad en la que participan al 50%, y con la que esperan desarrollar sus servicios no solo en España, sino a nivel internacional. El proveedor alemán DFS es en la actualidad responsable de los servicios de gestión del tráfico aéreo en Alemania y coordina 10.000 movimientos de aeronaves diariamente y tres millones de operaciones al año. Y la compañía española cuenta en su haber, además, con que es uno de los principales proveedores de tecnología destinada a gestionar el tráfico aéreo en más de 90 países, además de haber diseñado sistemas de simulación para el entrenamiento de los controladores aéreos , tanto de torres de control como centros de ruta.