Entre 2003 y 2013, el número de personas entre 15 años y 34 años que perdieron la vida en un accidente de tráfico se ha reducido un 83% (desde 2.387 fallecidos en 2003 hasta 405 en 2013). Es un dato que refleja “el gran compromiso por la seguridad vial de este colectivo”, manifiesta el director del Área de Prevención y Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, Jesús Monclús, en una jornada de seguridad vial dentro del Festival de Tendencias Urbanas Mulafest.

Los jóvenes representan menos del 25% de todas las víctimas mortales por accidente de circulación (frente al 44% que suponían en 2003).

“Son datos muy esperanzadores, que nos hacen pensar que los esfuerzos de las últimas décadas por educar y concienciar a niños y adolescentes se están viendo compensados. Los jóvenes son más receptivos que los mayores y nos están dando una lección”, señala Monclús.

No obstante, subraya que todavía cerca de 400 jóvenes de estas edades mueren en las carreteras y calles. “No debemos caer en la complacencia, sino aspirar al objetivo cero jóvenes fallecidos o heridos graves como consecuencia del tráfico”, insiste.

Para ello, debe reforzarse la labor de sensibilización y educación vial en la escuela. “Un niño que hace diez años empezó a recibir formación en su colegio, es hoy un joven que conduce de forma responsable y segura”, enfatiza.

La Fundación Mapfre desarrolla programas específicos para que los jóvenes, especialmente los peatones, motoristas y ciclistas, los más vulnerables,  adquieran conocimientos que le permitan identificar riesgos. Este año concederá becas por valor de 125.000 euros para que jóvenes desempleados obtengan el carné de conducir. Para acceder a estas ayudas, los interesados tienen que aprobar un curso se seguridad vial.