Han transcurrido setenta y siete años desde que los neurocirujanos William Jason Mixter y Joseph S. Barr describieran por primera vez la hernia discal lumbar que, actualmente, es el origen de nueve de cada diez problemas de espalda. Ese año de 1934, los dos clínicos estadounidenses también explicaron el tratamiento a ese síndrome: laminectomía y extirpación del núcleo del disco herniado. Desde entonces esta técnica neuroquirúrgica ha experimentado una serie de avances que son recogidos por el doctor Francisco Villarejo en su obra “Hernia discal lumbar: diagnóstico y tratamiento”. Han participado más de treinta reconocidos especialistas de toda España, con gran experiencia en el manejo de las enfermedades del raquis lumbar.

La columna vertebral lumbar está integrada por cinco vértebras que soportan el peso de nuestro cuerpo, al tiempo que protegen la médula espinal y la llamada cola de caballo, que está formado por las últimas raíces nerviosas y sirven de inserción a los músculos de la espalda. La hernia discal se suele originar en más del 95 por ciento de los pacientes entre los discos situados entre la cuarta y quinta vértebra lumbar y la primera sacra. El dolor ciático originado por una hernia discal se caracteriza por aumentar al hacer mínimos esfuerzos como estornudar o toser.

En este compendio editado por Ergon se aborda desde la anatomía, biomecánica, fisiopatología del dolor, métodos diagnósticos y el tratamiento en el que destaca el implante de discos artificiales y la artrodesis interespinosa mediante microcirugía . Esta última técnica tiene un protagonista, además del neurocirujano. Se trata de una prótesis flexible fabricada en titanio, en forma de «u», y del tamaño de una moneda de dos euros y fabricada en titanio. Está indicada para aplicarla en pacientes con estenosis vertebral en la zona lumbar; hernia discal lumbar muy voluminosa y en aquellos que ya han sido intervenidos pero siguen teniendo dolor lumbar.La intervención se lleva a cabo con anestesia local o general y, generalmente,  a las 24 horas el paciente regresa a su domicilio. Dos semanas después se puede incorporar a su trabajo.

El doctor Martínez-Lage, en la introducción de la obra, subraya que “adquiere una total justificación, ya que viene a cubrir esta necesidad de información, mediante la descripción de los diversos aspectos de la hernia de disco lumbar, su diagnóstico, y sus diversas modalidades de tratamiento”. Dice también que “los autores de los diferentes capítulos demuestran tener una gran experiencia en el manejo de las enfermedades del raquis lumbar. Ello supone que cada apartado esté considerado bajo los aspectos de la medicina basada en la evidencia y de la medicina basada en la experiencia. Indudablemente, algunas de las afecciones que se tratan tienen multitud

de soluciones, algunas incluso controvertidas, que son ampliamente debatidas a la luz de los conocimientos más recientes sobre la hernia discal lumbar”.

Como dato curioso, recordar que la columna vertebral lumbar está integrada por cinco vértebras que soportan el peso de nuestro cuerpo, al tiempo que protegen la médula espinal y la llamada cola de caballo, que está formado por las últimas raíces nerviosas y sirven de inserción a los músculos de la espalda. La hernia discal se suele originar en más del 95 por ciento de los pacientes entre los discos situados entre la cuarta y quinta vértebra lumbar y la primera sacra. El dolor ciático originado por una hernia discal se caracteriza por aumentar al hacer mínimos esfuerzos como estornudar o toser.

Finalmente y como apostilla el doctor Francisco Villarejo, jefe de los Servicios de Neurocirugía del hospital Niño Jesús y de la Clínica La Luz, el mecanismo por el que se hernia el disco pulposo se debe a una presión muy alta en su interior y a una serie de alteraciones bioquímicas que reducen la capacidad de distribuir armónicamente la presión a la que está sometida, y por otro lado a una debilidad del anillo fibroso. “Con el paso de los años la columna se degenera porque el disco pierde agua y se va deteriorando y saliendo de su sitio. Esto es la hernia discal”, añade.