En uno de mis últimos estudios, hace nueve años, el diagnóstico fue más preocupante, ya hablaba de una estenosis de colon (estrechamiento)  producida por una proliferación de células malignas. En ese momento acudí a un médico con formación macrobiótica.

Visité al médico, hoy integrado en el equipo profesional de SHA WELLNESS CLINIC, y al contarle mi historia médica, prestando poca atención a los estudios que llevaba, procedió a hacerme una revisión observando el iris de mis ojos y tocando puntos de las extremidades. Observó mi piel, los  rasgos de mi cara, mis manos, mi lengua y concluyó que lo mío no era grave y que se curaría con una dieta muy llevadera. Además de explicarme detenidamente cómo y por qué se había producido la estenosis, y como se solucionaría el problema.

Pasados unos días la mejoría fue notable, al cabo de un mes no solo habían desaparecido los problemas, irritaciones, inflamaciones, y dolores de treinta años, sino que empezaba a sentir como mi energía aumentaba, hasta el punto de necesitar aumentar mi actividad física. Ahí comenzó una nueva vida, y todo esto sin un solo medicamento, solo potenciando la enorme capacidad del organismo para renovarse y recomponerse mediante hábitos saludables.

Este descubrimiento maravilloso hizo que lo comentara con algunos amigos o familiares que sufrían diversas patologías y los que se pusieron en manos de este médico y cumplieron con sus dietas y recomendaciones solucionaron viejos problemas de salud. Diabetes tipo 2, psoriasis, tensión alta, problemas cardiovasculares, fibromialgia, problemas articulares, todos se curaban. Maravillado con los resultados, sentí cada vez más la responsabilidad de compartir con el mayor número de personas esta y otras maravillosas terapias naturales que tardé más de cincuenta años de mi vida en saber lo eficaces que son.

Ese es el nacimiento del centro SHA WELLNESS CLINIC, donde profesionales provenientes de más de veinte países se encargan de recomponer la salud de los visitantes llegados de los cinco continentes y todos compartiendo un principio básico, el sentido holístico de la salud. No es posible curar atacando el síntoma, es necesario ir al origen del problema. No apaguemos las alarmas, averigüemos por que se disparan y solucionemos el mal en su origen, lo demás son soluciones transitorias, en muchos casos necesarias, pero no ideales.