“Los afectados por las acciones contratadas a la salida a Bolsa de Bankia pueden recuperar el 100% de su inversión más los intereses y comisiones”. Es lo que afirma Eduardo Triviño, director general de Triviño Abogados, justo cuando se va a cumplir el cuarto aniversario de la polémica salida a Bolsa, cuando era presidente de la entidad Rodrigo Rato, ahora imputado por esta operación, entre otras.

Bankia salió a Bolsa el 19 de julio de 2011, a un precio de 3,75 euros por acción. En una semana cotizaba a 1,3 euros, por lo que más de 350.000 inversores, captados en su mayor parte entre la clientela de Caja Madrid, Caja de Ávila y Caja Segovia, perdieron gran parte de su inversión en apenas unos días,  y prácticamente la totalidad con la operación de «contrasplit», realizada el 22 de abril de 2013, ya con la entidad nacionalizada y con un nuevo equipo gestor al frente.

“Teniendo en cuenta que a estas personas no se les facilitó información completa y clara, cuando estas entidades están en la obligación a recabar de sus clientes datos sobre su situación financiera, experiencia inversora y objetivos de la inversión e informar de manera transparente sobre los riesgos de las operaciones contratadas, la Ley les ampara para recuperar la totalidad de su inversión más los intereses generados desde su adquisición, así como las comisiones cobradas”, insisten en Triviño Abogados.

Para Eduardo Triviño, «el objetivo es claro: la nulidad de los contratos”. “Para conseguirlo se debe realizar una reclamación judicial y de forma individualizada a cada caso en concreto y por vía civil; para de esta forma, tener garantía total de éxito en los tribunales. De esta manera se podrá recuperar la totalidad contratada, además de la imposición de costas a la entidad”, añade. El director general de Triviño Abogados precisa que “la única cantidad que cobra nuestro despacho» al afectado de Bankia son las costas que imponga el juez a la entidad nacionalizada.

Triviño cree que “existe una gran confusión entre el público sobre el plazo para llevar a cabo la reclamación”. “Todo depende del camino elegido para efectuarla. Si se pretende alegar error (cauce por el que están prosperando las reclamaciones actualmente) la ley concede un plazo de cuatro años”, argumenta.

Tres interpretaciones

El problema es que si se interpreta la ley literalmente el plazo se cumple el 19 de julio de este año, cuando se cumpla el cuarto aniversario de la salida a Bolsa de Bankia. Pero otras interpretaciones jurídicas precisan que ese plazo de cuatro años se ha de contar desde que el interesado ha tenido conocimiento de su error, lo cual no tuvo lugar hasta que Bankia reformuló sus cuentas el 25 de mayo de 2012, y los beneficios se transformaron en las mayores pérdidas registradas por una entidad financiera en España.

Y hay expertos que creen que se puede tomar como referencia el ‘contrasplit’ aprobado el 22 de abril de 2013.

Según cada criterio, el plazo para reclamar a Bankia por su salida a Bolsa finaliza el 25 de mayo de 2016 (4 años después de la reformulación de las cuentas) o el 22 de abril de 2017 (‘contrasplit’).

«Si se pretende alegar un cumplimiento defectuoso del deber de asesoramiento por parte de Bankia, el plazo es de 15 años. Lo que queremos poner de manifiesto es que los compradores de acciones siguen teniendo plazo suficiente para reclamar», concluye Eduardo Triviño.