La cifra de negocio de Orange en el mercado español alcanzó en el primer semestre del año un total de 1.847 millones de euros, lo que representa un retroceso del 3,8% en comparación con el mismo periodo de 2014, según informó la compañía.

En concreto, los ingresos de la compañía en España registraron un retroceso del 8,1% en el segmento de servicios móviles, mientras aumentaron un 1,5% por la venta de equipos y un 6,4% por servicios fijos.

En el segundo trimestre, la facturación de la operadora francesa de telefonía registró un descenso interanual del 2,5%, hasta los 920 millones de euros, después de haber caído un 5% en los tres primeros meses del año.

Entre abril y junio, la facturación de Orange en España disminuyó un 6,6% por servicios móviles, mientras subió un 1% por la venta de equipos y un 8,3% en el negocio de servicios fijos.

En cuanto al resultado bruto de explotación (Ebitda) de Orange en España, en los seis primeros meses alcanzó un total de 420 millones de euros, un 9% menos que un año antes.

Al cierre del primer semestre, Orange contaba en España con un total de 16,37 millones de clientes, lo que representa un aumento de 1,2 millones con respecto al mismo periodo de 2014.

En concreto, a 30 de junio el número de clientes de servicios móviles subió en 436.000 usuarios, hasta 12,85 millones, mientras que el número de clientes de operadores móviles virtuales (MVNO) alcanzó los 3,51 millones, un incremento de 561.000 con respecto al año anterior. En el caso de los servicios fijos, el número de clientes aumentó en un año en 211.000, hasta 2,04 millones.