La empresa ha destacado que si en estos primeros seis meses del ejercicio se hubieran mantenido los gastos en investigación y desarrollo y se excluyera el impacto de otros ingresos y de los lanzamientos más recientes de productos, su beneficio neto se habría incrementado un 31%, hasta los 17,6 millones de euros.

Los ingresos operativos del grupo aumentaron un 4% entre enero y junio, hasta alcanzar los 121,3 millones de euros, gracias principalmente a la «fortaleza» del negocio de especialidades farmacéuticas, cuyas ventas crecieron un 2%, y, sobre todo, al negocio de fabricación a terceros, que aumentó un 11%.

El grupo ha destacado el comportamiento de las ventas de Bemiparina en España, uno de sus productos ‘estrella’, que aumentaron un 7% hasta junio y se situaron en 24,9 millones de euros.

Los ingresos totales de la farmacéutica se incrementaron un 3% entre enero y junio, hasta sumar 121,9 millones de euros, frente a los 117,9 millones de euros del año anterior.

Para 2015, Rovi espera lograr una tasa de crecimiento de sus ingresos operativos de hasta el 10%, a pesar de que Farmaindustria prevé sólo un ligero incremento del mercado farmacéutico español (del 0,8%) y de que IMS Health apunta a que el gasto en medicamentos en España registrará una tasa de crecimiento cero o negativa para el periodo 2014-2018.

El beneficio bruto de explotación (Ebitda) de los laboratorios Rovi descendió un 7% entre enero y junio, hasta los 19,5 millones de euros, mientras que el resultado neto de explotación (Ebit) alcanzó los 14,6 millones de euros, con un retroceso del 12% respecto al mismo periodo de 2014.

La compañía ha explicado que el Ebitda semestral se vio afectado por el recorte en un 62% de la partida de otros ingresos (subvenciones), el incremento en un 33% de los gastos en I+D y los lanzamientos de productos recientes, que conllevaron unos gastos de ventas, generales y administrativos de 2,9 millones de euros.