Como ha solicitado la banca acreedora en las negociaciones que mantiene con la dirección de FCC, los accionistas de la empresa de infraestructuras y servicios lanzarán una ampliación de capital, que tendrá como cifra tope 600 millones de euros y mínima de 400 millones. Se trata de una transacción conocida en medios financieros y que ha sido confirmada este jueves 12 de noviembre en la presentación a analistasde los resultados de los nueve primeros meses de 2015.

El refuerzo de los recursos de la empresa servirá para que la banca acepte eliminar el llamado tramo B de deuda (quedan pendientes 450 millones de los 570 originales), lo que se traducirá en una reducción de los costes financieros -pagan intereses superiores al 5%-, que dificultan que entre en beneficios y pueda, entre otros temas, repartir dividendo.

El director financiero de FCC, Víctor Pastor, dio pocos datos adicionales sobre la operación, que se podría llevar a cabo antes que finalice el año; y si bien aseguró que las conversaciones están avanzadas, añadió que el calendario no está cerrado. La cancelación del citado tramo podría ir acompañada de una quita, que se baraja que sea por un máximo de un 15%, pero este aspecto forma parte aún de las negociaciones con los acreedores.

El director financiero calaró que en el caso de que la ampliación supere el 50 % del número actual de acciones, que es el porcentaje que ya está autorizado, se necesitará la aprobación por una nueva junta de accionistas