La Fundación Agbar ha dado a conocer el libro de ‘Ramon Margalef, ecólogo de la biosfera: una biografía científica’. La obra, que conjuntamente han editado con la Universidad de Barcelona en el marco de los actos del décimo aniversario de su fallecimiento en 2004, se ha presentado en el Ágora Agbar de Cornellà de Llobregat.

Angel Simón, presidente ejecutivo de Agbar, ha definido a Margalef como “un icono, un innovador en el pasado, para el presente y el futuro». Y gracias, en parte a sus estudios, Aguas de Barcelona ha sido una empresa pionera en el ámbito de la calidad del agua en la segunda mitad del siglo veintiuno, asegura Simón. También, ha remarcado que quieren seguir siendo innovadores de cara al futuro.

Por otra parte, Ignacio Escudero, director general de Aguas de Barcelona, ha recordado la importancia del profesor para la empresa ya que en los años sesenta colaboró con la revista ‘Agua’ donde varios de sus estudios permitieron a la empresa ser una de las primeras en incorporar los indicadores biológicos en la valoración de la contaminación hídrica.

El rector de la Universidad de Barcelona, Dídac Ramírez ha constatado que la colaboración con la Fundación Agbar es una demostración del deber de la universidad de conectar con su entorno económico y social mejorar la calidad de vida de la sociedad.

El acto, que se enmarca también en los actos de la Semana de la Ciencia, ha incluido un coloquio moderado por la periodista y presidenta de la Asociación Catalana de Comunicación Científica Cristina Ribas, en el que han participado catedráticos y doctores del ámbito ecológico y ambiental como Narcís Prat que además es coordinador del libro. La interpretación musical del violonchelista Pau Codina, ganador, entre otros, del 1º premio del concurso Guilhermina Suggia, ha puesto el colofón a la jornada.

Ramon Margalef fue profesor en la Universidad de Barcelona desde el año 1956, donde comenzó a impartir los primeros cursos de ecología antes de que esta disciplina existiera como materia de estudio en las universidades españolas. Allí obtuvo la primera cátedra de ecología de España en 1967. Considerado uno de los científicos españoles de mayor prestigio, junto con los premios Nobel Severo Ochoa y Ramón y Cajal, dejó escritas más de 500 publicaciones en los más de 65 años dedicados a la investigación.