La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) señala en un informe que el coste del recibo eléctrico para un consumidor medio en los nueve primeros meses de 2015 se situó en 0,241 euros el kilovatio hora, con un aumento del 4,84 % con respecto a los 0,23 euros por kWh del pasado año.

El organismo que vigila la competencia destaca que el recibo eléctrico se ha encarecido un 10,3% entre 2011 a 2015. Y las estadísticas apuntan a un alza del 83,2 % desde 2003, al pasar de 0,131 euros el kilowatio a los 0,241 euros actuales, impuestos incluidos. Estos datos corresponde a un consumidor medio (210 kWh al mes), que esté acogido al precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC), que anteriormente se denominaba la tarifa de último recurso (TUR).

Además en los últimos cuatro años se ha reducido el porcentaje que corresponde a la energía hasta el 35 % desde el 40%, mientras que sube el coste de amortización del déficit de tarifa, que pasa del 6,44 % al 14,84 %.