El empleo creció a un ritmo anual del 3,1% entre julio y finales de septiembre, una décima más que en el segundo trimestre. El pasado verano, y en relación con el año anterior, se crearon 511.600 puestos de trabajo. Por su parte la remuneración por asalariado aumentó un 0,3%, una décima menos que en trimestre anterior, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La evolución del empleo medida en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo ofrece una creación neta de 511.600 empleos en los últimos doce meses. Este dato supone un aumento del 3,1% respecto de hace un año, una décima más que el trimestre anterior y el sexto trimestre seguido en positivo, destaca el ministerio de Economía.

Con esta tasa anual, el empleo crece al mayor ritmo desde el tercer trimestre de 2007. Sin embargo, la remuneración por asalariado aumenta el 0,3% en tasa interanual, lo que supone una décima menos que en el trimestre anterior.

Sin embargo, en términos trimestrales, el número de puestos de trabajo registra una variación trimestral del 0,7%, dos décimas inferior a la del trimestre anterior (0,9%).

Por sectores, el empleo aumenta en agricultura y servicios, y cae en el resto de ramas de actividad. El mayor crecimiento relativo del empleo se registra en la agricultura, un 3,9% frente al 0,3% del trimestre anterior. La tasa de crecimiento del empleo de los servicios aumenta en tres décimas, situándose en el 2,9%.

Por el contrario, el empleo en la industria registra una variación del 2,5% frente al 3,1% del trimestre precedente. En el caso de la construcción, la tasa se desacelera 3,5 puntos y se sitúa en el 6,3%.

Frenan los salarios

Por su parte, la remuneración media por asalariado frena una décima en relación con el trimestre anterior (del 0,4% al 0,3%). Esta remuneración de los asalariados pesa más en el conjunto de las rentas, pasando del 3,6% al 4,0% en tasa anual. Sin embargo, este resultado es consecuencia del incremento en cinco décimas de la variación del número de asalariados (del 3,2% al 3,7%), ya que la remuneración media por asalariado cae una décima (del 0,4% al 0,3%).

De esta manera, el crecimiento del coste laboral por unidad de producto (CLU) se sitúa en el 0,1%, siete décimas por debajo de la variación experimentada por el deflactor implícito de la economía (0,8%). Mientras tanto, los beneficios empresariales se incrementan del 2,6% al 3,9%, medidos en términos de variación anual del excedente de explotación bruto y de la renta mixta bruta de la economía.

Mayor crecimiento

El avance del empleo es fruto del crecimiento de la economía, que sigue acelerando, especialmente debido a la demanda interior, según los datos del INE. Así, en el tercer trimestre, la producción española registró un avance del 0,8% respecto del segundo. En los últimos doce meses, el crecimiento se ha elevado al 3,4%, dos décimas más que el trimestre anterior.

La principal aportación al crecimiento proviene de la demanda nacional (3,9 puntos), mientras que el sector exterior detrae medio punto. Dentro de la demanda nacional es el consumo privado el que más tira de la economía (2 puntos), seguido de la inversión (1,3 puntos).