Esta semana se reúne el comité técnico asesor que decidirá la nueva composición de Ibex, el selectivo de la Bolsa española, y este encuentro puede suponer un cambio de más de uno de los valores que ahora forman parte del índice de referencia de la Bolsa española. Será, en primer lugar, la salida anunciada de Abengoa -en donde han cotizado las acciones B-, tras la crisis que ha llevado a la compañía tecnológica al preconcurso de acreedores.

La empresa andaluza daría paso al índice selectivo a Merlin Properties, lo que supondría la entrada de la primera socimi (sociedad inmobiliaria cotizada) en él. Esta compañía ha sido uno de los valores relevantes este año en Bolsa, y ha protagonizado operaciones relevantes como la  compra de Testa a Sacyr, hasta entonces una de las joyas del grupo que preside Manuel Manrique. Ahora, su capitalización supera a las de muchos valores del índice selectivo y sube más del 45% en el año, hasta 3.710 millones de euros de valor en Bolsa.

Otras de las empresas que podrían entrar en el Ibex, en lo que puede ser una de sus mayores revisiones, es la de Bolsas y Mercados Españoles (BME) o de Cellnex, filial de telecomunicaciones Abertis, con lo que, en ese caso, cotizarían dos empresas del mismo entramado. Sustituiría a FCC, que se ha dejado un 50% en el año.

Ambas cumplen con las condiciones para entrar en el Ibex, tanto por capitalización como por el porcentaje de free float (el capital que se negocia libremente en Bolsa). Por el contrario, un dato negativo para Cellnex es que no cuenta con un larga trayectoria de negociación.

Para las empresas que puedan salir del selectivo, la decisión de comité no sería una buena noticia en la medida de que algunos de los grandes fondos invierten en los valores de estos índices y, al salir, quedan fuera de estas apuestas de inversión.