La obtención de liquidez para no quedar colapsada es el primer objetivo de Abengoa, que tiene programadas varias reuniones esta semana. El primer encuentro será con la banca (previsiblemente hoy o mañana), a la que demandará liquidez por unos 100 millones de euros para afrontar el pago de nóminas y a proveedores. Sin embargo a esa cita la dirección de la empresa tecnológica tiene que ir con algunos deberes hechos, en lo que respecta a la obtención de dinero de otras fuentes, como son los fondos que invierten en infraestructuras y los hedge funds.

La empresa, que está en preconcurso de acreedores desde el 25 de noviembre, ha tomado contactos con las citadas instituciones de inversión colectiva, sin descartarse que entren en el capital, entre ellos el australiano Macquarie, así como con TCI, que aportó un préstamo para Yieldco, la filial estadounidense. Este fondo es el primer accionista privado del gestor de aeropuertos españoles, con el 7% del capital y en donde ha obtenido una sustanciosa revalorización.

El éxito en estos movimientos, solicitados por el comité negociador de la banca acreedora (Santander, Caixabank, Bankia, Sabadell, Popular, HSBC y Société Générale), se decanta como imprescindible, dado que los 100 millones no cubren las necesidades del grupo para el conjunto de los cuatro meses del preconcurso, y sumarían más de 400 millones.