Puede que yo esté un pelín suspicaz, pero lo ocurrido hoy me suena raro. ¿Que ocurrió? Uno de los grandes y con intereses en todas partes (incluido el «rating» de países soberanos) decidió degradar a todo el sector tecnológico americano desde el anterior «sobreponderar» a «igual que el mercado», arguyendo que «la fiebre de los tablets puede contaminar al mercado de PC‘s».

No seré yo el que les lleve la contraria, pero quienes fabrican los tablets son los mismos que quienes fabrican los PC’s y suele contarse en teoría económica que cuando se crea un nuevo producto de este tipo siempre se produce un efecto «canibalización» que queda sobradamente compensado por el «ensanchamiento del mercado» que se produce posteriormente. Es más, el tener «el último berrido tecnológico» se paga y bien, aumentando significativamente el margen del fabricante. Por el contrario, el margen del PC de sobremesa es cada vez menor. ¿Dónde está el problema? ¿Cuántos terminarán teniendo un PC de sobremesa, otro portátil y un tablet? Dénle tiempo al tiempo pero yo ya conozco a más de uno. Lo mejor es que el paso a «sobreponderar» se apoyó en el creciente mercado de los tablets. Ver para creer.

Viene todo esto a cuento de que una vez más uno de los «innombrables», aunque esta vez sea en otra rama de actividad, ha puesto el huevo a destiempo y ha desbaratado un mercado que ya estaba de por sí susceptible ante la llegada de la «temporada de resultados» que al cierre del mercado inauguró Alcoa (por cierto, no gustaron al mercado). De un plumazo todos los valores tecnológicos quedaron a la intemperie y el Nasdaq, que se había mostrado activo hasta la apertura del mercado, se convirtió en un lastre.

Total, que si los tecnológicos no tiraron, tampoco tiró el Nasdaq Composite y terminó contagiando al S&P 500, en el que el peso de valores del Nasdaq es mayor que en el Dow Jones. Sólo éste último, el megaíndice de las megaestrellas rutilantes de la industria americana consiguió mantener el tipo, y no en todo momento con dignidad. Al cierre, el Dow Jones subió un modesto 0,01%, mientras el S&P 500 caía un 0,28% y el Nasdaq Composite un 0,32%. Nada demasiado grave, pero este pequeño detalle se cargó una sesión que había comenzado decididamente al alza.