Cartas de enero de Juana Castro

12/04/2011

diarioabierto.es.

Juana Castro transcribe unas Cartas de enero, las hilvana en la pugna sideral de un remanso suave. Mucho ha tenido Juana Castro, que acaba de ganar el Premio Nacional de la Crítica por su último libro de poemas, Cartas de enero, que vivir y sufrir, para llegar a esta depuración final que ha revalorizado al fin toda su trayectoria. De hecho, Cartas de enero (Vandalia, Fundación José Manuel Lara, 2010), se publicó conjuntamente con Heredad, una antología del resto de su obra. Juana Castro es una poeta cordobesa que lleva mucho tiempo cultivando un esmero verbal, una intención ética. Todos sus libros anteriores –Arte de cetrería, como Cóncava mujer– le han dado el estímulo del reconocimiento lector, de un afianzamiento de los movimientos feministas que han visto en ocasiones, en la poesía de Juana, una razón de ser estética.

Juana Castro lleva muchos años reivindicando la poesía femenina. Pertenece a una generación –nació en Villanueva de Córdoba, en 1945- en la que se había vuelto imprescindible, o al menos así lo entendió ella, escribir desde su condición de mujer, y también explicarlo y matizarlo. Quizá para los nacidos a partir de la democracia, este empecinamiento bravío, constante, de Juana Castro por los valores feministas nos pueda parecer algo superado abiertamente –aunque luego ahí está el lacerante, indignante, doliente, terrorismo doméstico, para convencernos de que las cosas no han cambiado tanto como a veces parece-, y la cuestión de género, capital para ella y sus compañeras de aventura, sea ya también un concepto asumido. Entre mis compañeros escritores, una novela o un poema no es mejor ni peor por estar concebido por una mujer o por un hombre, sino por sus cualidades formales, por su ritmo, por su capacidad para la evocación o su respiración sensorial, su porte onírico. En la generación de Juana Castro, venida de una época de absoluto menosprecio hacia lo femenino, de subordinación de la mujer a un machismo asfixiante, vindicar la naturaleza de la mujer y su necesidad imperiosa de una igualdad absoluta de derechos, se convertía en un asunto poético.

La poesía de Juana Castro es plástica y sonora, tiene esa verbalizad gozosa enlazada con el 27 y con el Grupo Cántico, de Córdoba, pero también con la revista Caracola en Málaga y con Platero en Cádiz. Pura poesía viva, ese tiempo heroico regresado. Juana Castro se afina, resplandece, entre la compasión y el dolor.

¿Te ha parecido interesante?

(+12 puntos, 12 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.