El empleo en España sufrirá las consecuencias de la desaceleración mundial. Pero habrá que esperar a 2017 para ver los efectos del frenazo. Según las previsiones de Funcas, la fundación de cajas de ahorro, el empleo crecerá un 2,4% en 2016, y recortará su avance hasta el 2% en 2017.

Paralelamente la tasa de paro continuará bajando, hasta el al 19,9% en media anual en 2016; y al 18,2% en 2017.

Según sus pronósticos, la economía española habrá creado cerca de 800.000 puestos de trabajo, equivalentes a tiempo completo, entre 2016 y 2017.

Funcas mantiene sus previsiones de empleo a pesar de que, por otro lado, rebaja en una décima su previsión de crecimiento del PIB español, hasta el 2,7%, debido al menor crecimiento esperado de la economía mundial, y al aumento de la “incertidumbre” que tiene su reflejo en “importantes tensiones” en los mercados financieros internacionales durante los dos primeros meses del año.

La Fundación advierte que en su análisis no ha tenido en cuenta la “incertidumbre política interna” debido a la imposibilidad de predecir su desenlace si bien advierte que esta situación es un “importante factor de riesgo que podría golpear la marcha de la economía y obtenerse así un resultado económico “inferior al esperado”, alerta.

El empleo frena en 2017

La previsión de incremento del empleo del 2,4% para 2016 contrasta con los resultados obtenidos el año pasado cuando la economía fue capaz de crear un 3% más de empleos, según los datos de Contabilidad Nacional, y 530.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social, un 3,2% más.

Ya en ese momento, en enero, Funcas rebajó una décima, hasta el 2,4%, su previsión de empleo para 2016. La fundación mantiene ahora su pronóstico y lanza por primera vez su previsión de empleo para 2017, que recorta al 2%.

Además, la fundación estima que el PIB crecerá un 0,7% en el primer trimestre de 2016, lo que supone una “ligera desaceleración del crecimiento”, según su informe.

Algunos factores, como la rebaja del precio del petróleo, estimulan al alza el crecimiento del PIB. Sin embargo, por el camino han aumentado otros factores que presionan en sentido contrario como son un menor crecimiento esperado de la economía mundial, tanto de las economías desarrolladas como en las emergentes, así como su consecuencia que se refleja en tensiones crecientes en los mercados financieros.

Aun así, Funcas prevé que la economía remonte en 2017, con tasas de crecimiento trimestrales en torno al 0,6%, si bien cerrará el año con un crecimiento del PIB del 2,3%, “una vez superada la situación de incertidumbre global actual”, una tasa inferior a la de este año, advierten.

La inversión sufre el deterioro

Funcas prevé que el consumo privado acelere su crecimiento en 2016 hasta el 3,3%, a consecuencia del descenso del precio del petróleo, la creación de empleo y la rebaja del IRPF. Sin embargo, dicho impulso “se agotará” en 2017, año para el cual Funcas contempla un ligero encarecimiento del crudo mientras que por otro lado el consumo público se ralentizará, en línea con el cumplimiento de los objetivos de reducción del déficit.

Por su parte, Funcas revisa a la baja la inversión en maquinaria y bienes de equipo hasta el 5,1%. Y concluye que serán las exportaciones -con un crecimiento del 4%- y la inversión, los dos componentes de la demanda que más sufrirán los efectos de la desaceleración mundial.