El consejo de administración de Alaska Air Group ha anunciado la aprobación de la compra de Virgin America por 57 dólares por acción en efectivo, lo que representa un desembolso de 2.600 millones de dólares (unos 2.288 millones de euros).

La fusión está condicionada a la recepción de la aprobación regulatoria y a la aprobación por parte de los accionistas del acuerdo alcanzado entre Alaska Air y Virgin America. Ambas compañías esperan completar la transacción con la aprobación de los reguladores a más tardar el 1 de enero del año 2017.

Se espera que la transacción sea rentable en el primer año completo, para unos ingresos anuales de más de 7.000 millones de dólares, un 27% más. Así, ambas compañías esperan obtener 225 millones de sinergias netas totales anualmente con su plena integración. Incluyendo los arrendamientos de las aeronaves existentes, Virgin America tiene una deuda por valor de aproximadamente 4.000 millones.

El objetivo es tener una mayor presencia en la Costa Oeste, una mayor base de clientes y una plataforma mejorada para el crecimiento, convirtiéndolo en una de las cuatro aerolíneas estadounidenses más grandes. La combinación de los principales mercados de Alaska Airlines en el noroeste del Pacífico, el Estado de Alaska y ahora en California sumará más de 175.000 movimientos diarios desde los aeropuertos de Golden State, incluidos San Francisco y Los Ángeles. Por su parte, Virgin America ofrecerá conexiones más frecuentes desde Seattle, San Francisco y Los Ángeles. Además, esta transacción iniciará una oportunidad de crecimiento en mercados de negocios de la costa este, aumentando el acceso de Alaska Airlines a aeropuertos como el Ronald Reagan de Washington y los dos aeropuertos de Nueva York, el John F. Kennedy y el de LaGuardia.