“No somos parte del sistema”. El nuevo líder de UGT, Pepe Álvarez, ha presentado hoy con esta consigna la nueva línea de acción del sindicato, tras la marcha de Cándido Méndez. “Hasta ahora la concertación ha reportado al sindicato poco positivo”, ha insistido. En clave interna, la nueva UGT pondrá fin a la antigua “sopa de siglas” de las federaciones, si bien persistirá un modelo basado en hasta 27 sectores, según ha dicho

Álvarez se ha presentado ante la prensa en una sesión organizada por la Asociación de periodistas de información económica (APIE), en la cual ha advertido de un cambio en la línea de acción de UGT, ha dicho tras criticar algunos aspectos de la labor de su predecesor en el cargo Cándido Méndez.

En concreto, Álvarez ha anunciado que UGT iniciará esta nueva etapa liberándose del “peso institucional” que le atribuyen los ciudadanos. “No somos parte del sistema”, ha reiterado.

La advertencia se dirige especialmente al Gobierno, según ha dicho el líder de UGT, en un día marcado por el fin del plazo dado a las fuerzas políticas para pactar la formación de un nuevo Ejecutivo. Así, UGT dejará de participar en procesos de concertación que no ofrezcan garantías, ha avisado.

Críticas a Méndez

En particular, ha afirmado que UGT evitará nuevas fotos con el Gobierno como la que posibilitó la aprobación de la ayuda de 426 euros, en 2014. “Ha supuesto una estupenda foto para el Gobierno”, pero sin los efectos esperados, ha concluido.

En este sentido, el sindicalista ha condicionado su participación en el diálogo con el Gobierno a la firma de acuerdos “con sustancia” y ha dicho que el sindicato introducirá “sistemas de control” para verificar su cumplimiento.

Finalmente el líder de UGT ha destacado algunas prioridades del sindicato como medidas de apoyo al empleo de los mayores de 50 años, la restauración del contrato de relevo y la firma de un acuerdo estratégico sobre política industrial, que incluya medidas en materias como energía e I+D+i.

“No tengo voluntad de confrontación, lo que tengo la voluntad es de alcanzar acuerdos con sustancia”, ha concluido. “Si se dan estos cambios, volveremos a la concertación positiva”, subrayando que la meta del sindicato es el “reparto de la riqueza”.

En relación a la reorganización de UGT, el líder sindical ha negado tensiones en el seno de la organización a causa de los cambios en su estructura. Por el contrario, ha afirmado que «todo el sindicato quiere los cambios» que supondrán la fusión de las actuales federaciones en seis macroáreas, si bien se conservará una división sectorial en 25, 26 o 27 sectores, ha destacado. «Lo nuestro era una sopa de siglas», ha concluido.