La integración se realizará mediante un canje de acciones a razón de 1,222 acciones de Merlín por cada título de Testa que la socimi aún no controla.
Dado que la compañía que preside Ismael Clemente ya cuenta con el 99,93% del capital de Testa, la operación sólo afectará al 0,07% restante, esto es a 109.082 acciones de la exfilial de patrimonio de Sacyr.
Merlín y Testa ponen en marcha su fusión formal justo inmediatamente después de que la socimi cerrara este lunes la compra a Sacyr del 22,6% de la inmobiliaria patrimonialista que aún no controla, tal como estaba previsto.
Con la fusión simplemente cumplirán con un trámite administrativo y oficial, dado que, en la práctica, las dos inmobiliarias ya integraron hace meses su operativa y gestión, y se gestionan y funcionan como una sola compañía, según explicó recientemente el presidente de Merlin, Ismael Clemente.
La fusión supondrá la desaparición de Testa como marca tras 16 años de historia. La compañía y su denominación social surgieron en el año 2000, cuando la entonces filial de patrimonio de Vallehermoso, Vallehermoso Renta, compró y se fusionó con la entonces Prima Inmobiliaria. A la sociedad resultante se le puso la demoninación de Testa.
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