Según datos de la consultora PwC, unos 560.000 ingleses se  han acercado hasta la capital londinense para la celebración de la boda real.

En ese sentido, la oficina de turismo de Londres, Visit London, señaló que con una media de 500.000 visitantes por día y siendo Londres una ciudad acostumbrada a albergar eventos de gran magnitud, la capital ha estado preparada para acoger este histórico enlace, que ha podido superar las cifras de visitantes de 1981.

Hace treinta años, la boda del Príncipe Carlos y Lady Diana atrajo a la capital 600.000 visitantes más y con la popularidad del Príncipe William y Kate esta cifra ha podido incrementarse «significativamente», según Visit London.

Más de veinte millones de espectadores ha visto el enlace a través de la televisión, medio millón a través de Internet y más de 50.000 mediante teléfonos móviles.

Los hoteles han costado un 14% más de media

El precio medio para alojarse una noche en un hotel el día de la boda ha sido de 214 euros. Esto ha supuesto llegar a pagar un 14% más que en Semana Santa, puesto que durante los días 22 y 23 de abril el precio medio llegó hasta los 189 euros, según el comparador de precios hoteleros www.trivago.es.

A pesar de la subida del coste hotelero, el interés de los turistas españoles por visitar la ciudad durante la celebración del evento se  incrementó un 54% con respecto al mismo periodo del pasado ejercicio, según una encuesta realizada por HomeAway.es.

La boda más cara de la historia

El coste del enlace real ha supuesto un desembolso de 34 millones de dólares (22,9 millones de euros) a las arcas inglesas, de los cuales 32 millones de dólares (21,6 millones de euros) se han destinado exclusivamente a preservar la seguridad de los invitados.

Concretamente, la revista OK!Magazine reveló que la Casa Real se ha gastado 800.000 dólares (540.000 euros) en decorar la capilla de la Abadía de Westminter, donde se ha celebrado la ceremonia.

Además, durante la recepción de la boda, los invitados han degustado tartas de fruta, de chocolate y otras ‘delicatessen’ que han supuesto un desembolso de 150.000 dólares (101.000 euros). Y durante toda la noche se servirá el exclusivo Champagne Bollinger, que ha costado más de 60.000 dólares (40.500 euros).

La alianza de boda que ha lucido Kate, un anillo de oro galés está valorado en 11.000 dólares (7.400 euros). El vestido, se calcula que ha costado alrededor de 434.000 dólares (293.000 euros).