La rotación crece entre los trabajadores indefinidos. En la actualidad se necesita firmar 1,45 contratos ‘fijos’ para que, cruzando dos estadísticas, se detecte un nuevo asalariado permanente. En 2012, cuando se aprobó la reforma laboral, solo se necesitaban 1,2 contratos. Para Comisiones Obreras, la culpa reside en la reforma laboral. Y en especial, en el contrato de emprendedores, que ofrece durante el primer año la posibilidad de despedir de forma libre y gratuita.

El incremento de la rotación entre los trabajadores más afortunados, los que tienen un contrato indefinido, preocupa en el sindicato. Desde la aprobación de la reforma, en 2012, la rotación laboral entre lo indefinidos cada vez es mayor. Dicho de otra forma, cada vez es necesario firmar más contratos indefinidos para consolidar un empleo permanente, afirma Fernando Lezcano, portavoz del sindicato.

Para ilustrar su tesis, la central ha cruzado dos fuentes estadísticas. Por un lado, el registro de contratos del ministerio de Empleo. Y por otro la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Del cociente de ambos datos se extrae la llamada ratio de rotación de los trabajadores indefinidos, que compara el número de contratos registrados con los nuevos trabajadores asalariados indefinidos (con menos de un año de experiencia, que refleja la EPA.

Así, comparando ambas tablas, se observa que mientras que en 2012 se firmaron 1,085 millones de contratos indefinidos, revelando la EPA al final del año algo más de 900.000 nuevos asalariados indefinidos; en 2015, se necesitó firmar algo más de 1,5 millones de contratos para que la encuesta reflejara cerca de 1,04 millones de asalariados.

Por tanto la ratio de rotación creció desde un 1,2 en 2012; hasta el 1,45 de 2015.

Crecimiento fuerte, empleo precario

La comparación es significativa si se introduce otro factor, como el crecimiento económico. Así, mientras en 2015, la economía española crecía a un ritmo del 3,2% y creaba algo más de 1,03 millones de nuevos asalariados indefinidos; en 2009, con la economía en recesión, y el PIB cayendo a un 3,6% anual, se creaban 1,15 millones de nuevos asalariados indefinidos.

“Es decir, en 2009 (y en 2010), con la economía sumida en una profunda crisis y destruyendo un volumen elevado de empleo se logró consolidar a final de año más empleo indefinido que en 2015 y para lograrlo fue necesario firmar un número menor de contratos indefinidos”, explica Lezcano.

La conclusión de CCOO es que la reforma laboral ha conseguido que “la contratación indefinida se asocie cada vez más con la rotación laboral y la precariedad”, y menos con una relación laboral estable.

“Cada vez un número mayor de contratos indefinidos no responden a su nombre y tienen una trayectoria laboral inferior al año”, defiende.

Para el sindicato la razón fundamental del incremento de la rotación de los indefinidos se encuentra en la reforma laboral. Esta reforma, aprobada en febrero de 2012 por el Gobierno ‘popular’, abarató el despido por la doble vía de bajar la indemnización por un lado, y facilitando el marchamo de despido procedente.

Pero además introdujo un nuevo tipo de contrato, el contrato de emprendedores, que contempla un año de prueba durante el cual el empresario puede despedir a un trabajador, sin alegar ninguna causa ni pagar ninguna indemnización.

Por este motivo CCOO defiende la necesidad de derogar las reformas laborales, en alusión a la del PP pero también a la del PSOE de Zapatero, por las “nefastas consecuencias” que estas regulaciones tienen para el empleo, sostienen.