La empresarial CEOE ha saldado hoy con una rotunda negativa la pretensión sindical de alcanzar una subida salarial del 4% el año próximo. “Es una exageración y es irrealizable”, ha afirmado el vicepresidente de la empresarial y presidente de Cepyme, Antonio Garamendi.

Por su parte, los sindicatos han replicado a los empresarios que moderar estas rentas “no equivale a congelarlas”. Y han citado además las palabras de Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), quien defiende la necesidad de elevar el ritmo de subida de las rentas del trabajo a fin de potenciar la recuperación de la economía europea.

En España, las diferencias se enmarcan dentro del proceso de negociación que mantienen empresarios y sindicatos a fin de determinar el alza salarial recomendado en la firma de los convenios de 2017, y que, tras la reunión de la semana pasada, aguarda a una segunda cita el próximo 20 de octubre.

A esta reunión, los sindicatos llegan con posiciones divididas. Y mientras CCOO defiende alzas de entre el 1% y el 2%, UGT en cambio se ha descolgado con una pretensión del 4% en lo que supone la primera negociación que protagoniza la nueva ejecutiva presidida por Pepe Álvarez, tras la salida de Cándido Méndez de la dirección ‘ugetista’.

Rebaja de cuotas

En un desayuno informativo, Antonio Garamendi ha recordado hoy martes que la subida pactada en lo que va de año en los miles de mesas de negociación de convenios colectivos en nuestro país, es del 1,05%, a pesar del límite pactado, del 1,5%.

En opinión de Garamendi, la moderación salarial es el factor clave que explica el éxito de las exportaciones españoles. Según ha dicho, la única forma de cumplir con la recomendación de subir salarios formulada por Draghi reside en una bajada de las cuotas que pagan las empresas a la Seguridad Social.

“Nos pegaron una subida del 20% o del 30% de los costes laborales”, ha recordado Garamendi en referencia a cuando, en 2014, se fijó la obligación de cotizar por los vales de comida y el transporte.

“Si se va a hablar del 4% es que directamente alguien no se quiere sentar a la mesa”, ha remachado el empresario.

UGT no habla de cifras

Por su parte el líder de UGT, Pepe Álvarez, ha sido el encargado de contestar a los empresarios. En su opinión, moderar los salarios no equivale a congelarlos, ha dicho, sin hacer ninguna referencia a la cifra del 4% de alza que su sindicato reclama en la negociación sobre los convenios de 2017.

Álvarez ha abogado por “repartir parte de los beneficios y la productividad que se generan en las empresas”. Y ha defendido que una “recuperación neta de poder adquisitivo” de los salarios puede “ayudar a que la gente viva mejor”.

En cuanto a las palabras de Draghi, el sindicalista ha reinvindicado que la petición de subir salarios de forma importante es una petición que tiene mucha “fuerza”. Y que ahora tiene “un poquito más” tras las declaraciones del responsable del BCE.

Por su parte, la ministra de Empleo en funciones, Fátima Báñez, ha pasado de puntillas sobre el tema y ha dicho que las palabras de Draghi van dirigidas a empresarios y sindicatos, que son quienes protagonizan la negociación colectiva en nuestro país.