El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha convocado con carácter urgente a los líderes empresariales y sindicales en el Palacio de La Moncloa, a fin de «impulsar» el acuerdo sobre negociación colectiva, en el que CEOE-Cepyme y UGT y CC.OO. llevan trabajando de forma intensa desde el pasado mes de febrero, tras firmar el Acuerdo Social y Económico (ASE). Pese a que el Ejecutivo les había fijado el 18 de marzo para tener concluida la negociación, lo cierto es que aún siguen «limando» flecos.
Las elecciones del próximo 22 de mayo, además, ha provocado que en la CEOE no haya prisas por cerrar el acuerdo, ya que su presidente Juan Rosell es partidario de que la firma se produzca después de los comicios autonómicos y locales a fin de que nadie pueda «aprovechar» este acuerdo en el ámbito político, y una «foto» de Zapatero con los dirigentes sociales en estos momentos daría lugar a interpretaciones.
Lo cierto es que algo ocurre para que el acuerdo no se firme. En teoría, la pasada semana también hubo una renión al más alto nivel entre los líderes empresariales y sindicales para desbloquear los «flecos» abiertos. Sin embargo, la intervención del presidente del Gobierno una semana después hace pensar que algo «está atascado».
¿Razones políticas?
Aunque también han aparecido interpretaciones en el ámbito político, dado que Zapatero ha suspendido un viaje que tenía programado a Noruega para intervenir en una mesa redonda sobre empleo y crecimiento, en la que también va a participar el primer ministro griego, Giorgos Papandreu. Pero el presidente del Gobierno anunció en la noche del pasado martes al primer ministro noruego, Jens Soltenberg, que no acudiría por tener una «reunión inaplazable sobre reformas económicas».
La coincidencia con el primer ministro griego, interpretan algunos, sería la razón por la que Zapatero ha decidido no acudir a la cumbre de líderes progresistas organizada por el centro «Policiy Network«, que tiene como objetivo promover políticas progresistas y renovar la socialdemocracia. Y eso que el presidente del Gobierno había mostrado especial interés dado que España cuenta con uno de los principales fondos soberanos de inversión noruegos, y Noruega es uno de los principales inversores financieros en España. Además el fondo soberano noruego tiene acciones en ochenta de las empresas españolas que cotizan en la Bolsa.
Hasta ahora Zapatero había acudido a varias cumbres de líderes progresistas y había acudido a las dos últimas que tuvieron lugar en Londres y Viña del Mar (Chile).
Flexibilidad interna y ultraactividad
En estos momentos, los agentes sociales aseguran que sólo quedan los «últimos flecos» para cerrar el acuerdo y centran el mayor de los obstáculos en la flexibilidad interna y en la ultraactividad de los convenios, por lo que aún es necesario un empujón en esta dirección. Aunque la presencia de Zapatero también es interpretada como una búsqueda de «hacerse la foto» en plena campaña electoral.
En todo caso, el acuerdo no se firmará hasta después de las elecciones del 22 de mayo, ya que la CEOE ha convocado a su junta directiva para el 25 de mayo, una vez celebrados los comicios, pese a que los dos órganos de decisión (consejo confederal de CCOO y comité confederal de UGT) se han celebrado esta semana, por separado.
El último gran avance en la negociación se produjo tras el encuentro de Juan Rosell, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, la pasada semana, cuando dejaron prácticamente cerrados los cambios a introducir para frenar el absentismo laboral y el tratamiento que se debe dar a las mutuas de accidentes y enfermedades profesionales, pese a no ser materias incluidas inicialmente para formar parte de la negociación colectiva. En este último avance estuvo presente en la reunión el ministro Valeriano Gómez, pese a que hasta ese momento habían sido siempre reuniones bilaterales.
Desde el Gobierno se ha respetado escrupulosamente la autonomía de organizaciones empresariales y sindicales, pese a la demora de dos meses que llevan para alcanzar el acuerdo, ya que como el propio ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha reconocido es preferible un acuerdo entre los agentes sociales para que la reforma de los convenios sea eficaz. Trabajo siempre ha asegurado que tenía su borrador de reforma preparado por si no se producía el acuerdo, al tiempo en que presionaba recordando a empresarios y sindicatos que la negociación no podía ser «eterna».
De momento, en UGT no dan nada por seguro, uno de los responsables de dirigir la negociación, el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, ha asegurado que aún existen «nudos» que impiden el acuerdo, entre los que priorizó la ultraactividad, descartando de esta forma que esté todo cerrado y confirmando que a la negociación aún le queda recorrido.
Sin embargo, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha dicho todo lo contrario y ya ha anunciado que su sindicato hará una exhaustiva campaña en todo el territorio nacional con el objetivo de que todos los trabajadores conozcan el acuerdo.
Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.