Uno 150 trabajadores de la planta de Clesa en Caldas de Reis (Pontevedra) –que actualmente aplica un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) rotatorio temporal- han peregrinado hasta Santiago de Compostela con el fin de «luchar» por su puestos de trabajo e «insistir en que la empresa es viable».

Así lo ha apuntado en declaraciones a Europa Press, a su llegada a la Plaza del Obradoiro, el miembro de comité de empresa Manuel Raña, quien ha remarcado que han decidido hacer este tipo de protesta con el fin de que «se sepa» que defienden sus puestos de trabajo y sus productos «que son muy buenos» para que «sigan estando en el supermercado».

Con pancartas en las que se podía leer ‘En defensa dos postos de traballo’, el representante de los trabajadores ha remarcado que «están en juego» 160 empleos directos en Caldas de Reis, «y todo lo que la rodea pueden ser unos 300 puestos de trabajo».

En una reivindicación en la que también ha participado la corporación municipal, los trabajadores han realizado unos 12 kilómetros desde San Martiño de Osebe hasta Santiago, como último tramo de una peregrinación que tuvo otras dos etapas en pasados fines de semana en los que se recorrió el tramo desde la factoría de Clesa hasta Valga, y desde Valga a San Martiño de Osebe.

CONCURSO

Asimismo, Manuel Raña ha asegurado que los trabajadores «están esperando» entrar en concurso de acreedores pues «parece que se habla y rumorea que será para el lunes», aunque ha apuntado que no se ha comunicado «nada» a los trabajadores.

Según ha subrayado, «el juez pidió más documentación» y «parece que ahora tiene que ser», al tiempo que ha destacado que los trabajadores tienen «esperanzas» de que envíen un administrador a la planta de Caldas «y mirar si es viable».